Participamos en una sociedad que utiliza fotografías constantemente. Es tan sencillo hacerlas que todos las usamos y con ellas construimos un retrato de nuestra realidad que se convierte finalmente en un espejo del propio fotógrafo. Pero ¿por qué y para qué fotografiamos?

Los usos de la fotografía son los que dan lugar a la selección de los diferentes lenguajes. El retrato de nuestro entorno se puede construir de mil maneras, y la cámara solo evidenciará nuestras intenciones y nuestra forma de mirar que es, en definitiva, lo imprescindible para cada fotógrafo que quiera construir su propio relato.

En busca de la identidad fotográfica, este taller propone trabajar sobre un pequeño proyecto realizable, sugerido o elegido por cada participante, hacer un seguimiento del mismo y darle forma final de uso. Con este proyecto se pretende, además, allanar el tránsito entre la fotografía doméstica y los posibles usos profesionales y utilizar la experiencia como herramienta en los diferentes campos de la construcción técnica de la imagen, la edición de libros, el comisariado de proyectos y la exposición de obra.

Esta actividad, organizada por la Subdirección General de Promoción del Arte, está orientada a aficionados avanzados o incipientes profesionales del ámbito de la fotografía.