Con esta muestra, que incluye 85 fotografías, Foto Colectania quiere ahondar en la obra de algunos de los creadores de su colección que tienen la introspección como punto esencial de sus miradas y trayectorias fotográficas.

Más allá de buscar unos rasgos estilísticos comunes, la muestra se centra en siete autores que han concentrado su búsqueda en profundizar en la propia naturaleza de la fotografía, ya no sólo como medio de capturar la realidad sino como herramienta para dar rienda suelta a la imaginación.

Desde dentro. Fotografías de la Colección Foto Colectania propone un recorrido por una nueva mirada fotográfica que se manifestó a partir de los años setenta y que se alejó del documentalismo anterior para reivindicar una visión más íntima y personal.

Extraer un mundo interior

Tal y como apuntó el historiador de la fotografía Jean-Claude Lemagny, hay una serie de autores para los cuales la cámara se convierte en una ventana a partir de la cual los fotógrafos pueden extraer su mundo interior. Es el caso de los fotógrafos seleccionados que tiene en común una mirada íntima y poética.

Desde dentro, que cuenta con el apoyo de la Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes, se enmarca en el objetivo de Foto Colectania de difundir la fotografía española y de dar a conocer los fondos de su colección en el propio espacio de la Fundación como ya se hizo con las exposiciones Recorridos (2008), Orden y Desorden. Paco Gómez (2010) y Álbum. Joan Colom (2011).

 

Resonancias

La exposición muestra imágenes, entre otros, de Gabriel Cualladó, primer Premio Nacional de Fotografía en 1994 y uno de los primeros fotógrafos en conseguir que la fotografía fuera considerada en España como género artístico. Su trabajo representa el paso de la fotografía costumbrista a la fotografía humanista. Tony Catany, Premio Nacional de Fotografía 2001, considerado por la revista Life entre los cien mejores fotógrafos del mundo, se dio a conocer internacionalmente por su uso de los calotipos (negativos sobre papel y copias positivadas por contacto) o Alberto García-Alix, Premio Nacional de Fotografía 1999 y creador de auténticos documentos sociales fotográficos con un sello personal propio.

En esta exposición destacan también las resonancias que se establecen entre las obras de los diferentes fotógrafos seleccionados: Cualladó y Gómez realizaron exposiciones conjuntas y sintieron la necesidad de fotografiar de una manera más pausada que sus contemporáneos; Freixa y Rivas compartieron afinidades creativas y personales; Catany, cuya experimentación en los procesos fotográficos está directamente relacionada con el contenido de sus imágenes; Alberto García-Alix, que muestra una obra en el límite del arte y la vida; o el lenguaje aparentemente improvisado y fugaz de Caramés que remite a lo que se ha denominado «fotografía gestual».