De entre los más de 650 candidatos presentados, el jurado, compuesto por Nuria Enguita, integrante del equipo de comisarios de la Bienal de São Paulo 2014; Tania Pardo, comisaria independiente, y Francesco Stocchi, senior curator en el Modern and Contemporary Art Museum Boijmans Van Beuningen de Róterdam; seleccionó los 10 proyectos artísticos ganadores, dotados con 12.000 euros cada uno.

Los artistas elegidos para esta exposición son Elena Aitzkoa, Objetos nómadas; Karlos Gil, -–––––– ¬˘ ; Cristina Garrido, Just what it is that make today’s exhibitions so different, so appealing?; Fermín Jiménez Landa, Acampada libre; Lucía Simón, Sin título-libretos; Pep Vidal González, Following the (Magnetic) North Pole; Daniel Jacoby, Jagata: Part I.; Nadia y Laila Hotait, La noche entre Ali y yo; Karlos Martinez, B, Textile from exile; y Oriol Vilanova, Sin perder casi nada.

Comisariada por Ignacio Cabrero, Generación 2015 ofrece como leit motiv caminar sin rumbo, perderse y dejar que el azar o las calles de la ciudad te guíen. “Ser como el flâneur descrito por Walter Benjamin, que se busca caminando, viajando, deambulando por la calle. Ser nómada en la propia ciudad como experiencia reveladora, pues el artista actual ya ha estado en todas partes y, después de muchos viajes, continúa buscando ese vacío, esa ausencia de la que habla Estrella de Diego en sus Travesías por la incertidumbre: ‘Salir de viaje es, en el fondo, un recurso frecuente para llenar los vacíos, una estratagema que se sabe de partida abocada al fracaso’. Un fracaso que seduce a los artistas como móvil para continuar buscando, viajando… para seguir perdiendo el norte”.

Encontrar la propia voz

Para el director de la Fundación Montemadrid, José Guirao, «no es sencillo encontrar un común denominador entre estos artistas, cuya práctica es tan variada como rica la escena artística actual. Al igual que en anteriores convocatorias, muchos de ellos han realizado estudios o residencias en otros países y continúan viajando e incorporando a su proceso creativo estas experiencias como forma de hallar nuevos caminos. Podría decirse que esta forma de estar en el mundo de un lado para otro, ignorando fronteras y rompiéndolas, es representativa de una generación que más que nunca asimila el mundo globalizado intentando encontrar una voz propia».

En los últimos 13 años más de 15.000 artistas han participado en este proyecto que evoluciona con cada nueva edición, adecuando sus propuestas a las demandas de la creación contemporánea y actualizando su oferta, por lo que se ha convertido en un referente entre la comunidad artística de nuestro país.