Les Ballets Trockadero de Montecarlo se creó en Nueva York hace justo 40 años como una compañía alternativa que con los años ha ido creciendo, pasando del Off Broadway a actuar en los grandes templos de la danza, como el Bolshoi de Moscú.

La peculiaridad de esta compañía neoyorquina radica en que está formada por bailarines profesionales, varones, especializados en la gama del repertorio clásico y original del estilo ruso. Además, otra de sus armas de seducción es la comedia, que consiguen al exagerar las circunstancias de la narrativa de la danza clásica, los accidentes y la incongruencia de las coreografías.

El peso de un hombre balanceándose sobre las puntas de los pies para representar a cisnes, sílfides, ninfas del agua, princesas románticas y féminas victorianas engrandece, en lugar de ridiculizar, el espíritu de la danza clásica. Clásicos como El Lago de los Cisnes o Paquita adquieren una nueva perspectiva, gracias al talento de estos magníficos bailarines.

Programa del 40 aniversario

  • El lago de los cisnes (Act. II)

Música: Pyotr Ilych Tchaikovsky

Coreografía: después de Lev Ivanovich Ivanov

Vestuario: Mike Gonzales

Iluminación: Kip Marsh

Decorado: Clio Young

Es el trabajo más representativo del Ballet Trockadero. La historia de Odette, la hermosa princesa convertida en cisne por un maligno hechicero y cómo fue salvada por su amado príncipe Sifrid, no era un tema inusual cuando Tchaikovsky escribió su primer ballet en 1877. La metamorfosis de mortal a ave y viceversa ocurría con frecuencia en el folclore ruso.

  • Pas a deux (se anunciará)

Go For Barocco

Música: J.S. Bach

Coreografía: Peter Anastos

Vestuario: Mike Gonzales

Iluminación: Kip Marsh

Como heredero del estilo de Balanchine Middle Blue, en un periodo blanco y negro, este ballet fue el primero en ser identificado por su total frescura y su coreografía sinfónica, lo que delineó la nueva danza clásica. También ha sido nombrado “el reloj de pulsera” para Balanchine.

  • Paquita

Música: Ludwig Minkus

Coreografía: Marius Petipa

Puesta en escena: Elena Kunikova

Vestuario y decorado: Mike Gonzales

Iluminación: Kip Marsh

Paquita es un magnífico ejemplo del estilo francés que se exportó a San Petersburgo a finales del siglo XIX. Estrenado en la Ópera de París en 1846, en su versión original se trataba de un ballet-pantomima en dos actos, coreografiado por Joseph Mazillier y música de Ernest Deldevez. Un año después, Paquita fue producida en Rusia, donde Marius Petipa encargó a Ludwig Minkus (compositor de sus dos últimos éxitos: Don Quijote y La Bayadera), a escribir una música adicional con el fin de lograr un brillante divertimento respecto de Paquita de Mazillier. Para ello, Petipa coreografía un Pas de Trois y un Grand Pas de Deux en su estilo característico. Éstos pronto se convirtieron en los mejores momentos de bravura de la noche, hasta el punto de que son los únicos fragmentos de Paquita que se han conservado.