Martín inició su carrera profesional en 1914, cuando las revistas gráficas estaban en su máximo auge. Instaló su estudio fotográfico en la calle Fuenterrabía de San Sebastián, inaugurado con posteridad, en abril de 1915, con el nombre de Photo-Carte. El fotógrafo y sus colaboradores recorrían día a día la playa y los lugares de referencia. Sus instantáneas daban cuenta de las últimas tendencias en la moda y de mujeres posando con sus novedosos trajes de baño.

Pero no se trataba de instantáneas casuales, sino que buscaba la distinción en sus imágenes. La Avenida de la Libertad, el Paseo de la Concha y sobre todo la esquina del Hotel Londres y de Inglaterra se convirtieron en sus escenarios. El autor se acogió a una experimentación permanente. Era un reportero que dejó miles de testimonios, de retratos anónimos, de accidentes, de alegrías y tristezas.

Sociedad convulsa

La exposición se desarrolla de manera temática, incidiendo en los temas y aspectos que hacen único a este autor. En el recorrido se pone de manifiesto cómo retrató Ricardo Martín a la sociedad convulsa que lo rodeó, la importancia de los observadores en sus fotografías, lo hipnótico de las masas de gente, el gentío que tanto le gustaba fotografiar. En un evocador texto, Lee Fontanella describe a Ricardo Martín como ubicuo ya que pareciera estar en todos los acontecimientos acaecidos en esa época, moviéndose con naturalidad entre distintas clases sociales.

La muestra tiene diferente secciones. La primera de ellas, La ciudad como escenario, muestra imágenes realizadas en decorados naturales de San Sebastián. La Guerra del Rif ofrece una visión antibelicista del autor, que tenía 39 años cuando se embarcó hacia África. A Martín no le atraía el desarrollo bélico de la guerra, sino el lado humano del conflicto. Realizó sobre todo fotos de grupos, en su mayoría jóvenes guipuzcoanos, retratando también a los heridos que volvían a la ciudad y las manifestaciones de protesta por la guerra en 1922.

Retratista

La representación del retrato es la tercera parte. En ella se muestra al fotógrafo de estudio, aunque Martín no fue un retratista al uso sino un artista que se dejó llevar por la espontaneidad, por la intuición. Gracias a su talento supo retratar tanto a sus vecinos como a los personajes que pasaron por la ciudad, entre ellos célebres escritores, actores, artistas, políticos: Azorín, Sorolla, Benavente, Baroja, Alcalá-Zamora, Chaplin, Harry d’Abbadie d’Arrast, Douglas Fairbanks, Buster Keaton y Josephine Baker, entre otros.

En La sensación de movimiento se recogen las imágenes de competiciones de natación, fútbol, ciclismo y hasta fotografías de coches en el circuito de Lasarte, que fueron publicadas en revistas y periódicos como La Esfera, El Heraldo Deportivo o As, entre otras. El último apartado, La mujer. Una visión de modernidad, recoge los primeros años del movimiento feminista. Un período, a comienzos del siglo XX, en el que San Sebastián vivía los años de la Belle Epoque.

Gracias a la colaboración de la Filmoteca Vasca se incluye la proyección de una pequeña película de los años 20, San Sebastián y Lasarte, que contextualiza y completa la exposición permitiendo ver los escenarios de Martín en movimiento.


Actividades paralelas

Con motivo de la exposición se ha editado un amplio catálogo, el primer estudio en profundidad del autor, que cuenta con un texto del comisario de la muestra, Juantxo Egaña, conocedor en profundidad de la Fototeka Kutxa y que ha realizado un estudio riguroso y exhaustivo de la figura de Ricardo Martín. El catálogo contiene también un texto del profesor Lee Fontanella, uno de los principales especialistas en la historia de la fotografía española.

Durante el periodo de la muestra se celebrará una serie de conferencias con la intención de contextualizar el trabajo y la época de Ricardo Martín en la propia sala Kubo-kutxa. Estas son Un paseo por el San Sebastián de entreguerras, periódico en mano (24 de noviembre), por el periodista Mikel Gurpegui; La mujer en el período de entreguerras: avances sociales y transgresiones estéticas (30 de noviembre), por la historiadora Miren Arzalluz; Rif: cien años no son nada (15 de diciembre), a cargo del fotógrafo Clemente Bernad; y Abordando el tema de un fotógrafo de preguerra (11 de enero), por el experto en fotografía antigua Lee Fontanella.