Del Arco firma la versión y la dirección de un montaje protagonizado por Manuela Paso, Miriam Montilla, Daniel Pérez Prada y Jesús Noguero en el papel del célebre escritor sueco. Enquist compone un magnífico texto teatral que parte de una profunda investigación sobre la persona y la obra de Strindberg, uno de los dramaturgos más grandes de la historia de la literatura, que contribuyó a cambiar radicalmente la forma de escribir y hacer teatro a finales del siglo XIX.

A partir de hechos reales, Enquist construye una hipnótica ficción de ‘teatro dentro del teatro’ que habla de las relaciones entre hombres y mujeres, el empoderamiento femenino, la misoginia, las intimidades de pareja, la creación artística y sus procesos, la libertad, la identidad personal, el miedo a la soledad…

La obra se sitúa en el año 1889. Acosado por las deudas y la miseria, August Strindberg decide abrir un teatro en Copenhague para llevar a escena sus obras y seguir experimentando sobre el hecho teatral. Ha nombrado directora de este Teatro Experimental a su mujer, Siri, madre de sus tres hijos, actriz que abandonó las tablas para seguir a su marido al exilio que él mismo se impuso y con la que el escritor está inmerso en un salvaje proceso de divorcio. Strindberg siempre había procurado, sin éxito, que Siri encontrara su lugar en el teatro, pero la generosidad del maestro al nombrarla directora tiene una contrapartida interesada: forzarla a que vuelva a su lado con los niños y poder así recomponer la familia que tanto añora.

Fortísimas personalidades

El choque entre estas dos fortísimas personalidades no se hace esperar, y más cuando Strindberg descubre que la actriz a la que su mujer ha confiado el otro personaje femenino de la función que ella misma protagoniza no es otra que su amante, Marie. La tríbada, la lesbiana. Tanto Siri como Strindberg son conscientes de que poner en escena La más fuerte, el drama que el autor ha escrito para la ocasión, es su última oportunidad en muchos sentidos: para ella, de volver a los escenarios y recuperar una carrera profesional que la convierta en una mujer emancipada y libre; para él, de recuperar a su esposa.

Pero ninguno de los dos escapa a su propia naturaleza ni a su historia común. La presencia de Marie, que ahora vive con Siri y sus hijos, convierte este peculiar ensayo de teatro, tal y como el propio Strindberg describió en uno de sus libros, en algo “cruel, feo, bello, poético, prosaico, sentimental, crudo, horrible, delicado”.

En palabras de Miguel del Arco, “Strindberg se pasó la vida sembrando la polémica, cultivando la irreverencia y manteniéndose en constante contradicción. La más grande, profunda y dolorosa que mantuvo fue, seguramente, consigo mismo. Contradicción que en algunos momentos se convirtió en enfermedad esquizoide. Sus tres esposas se plantearon en algún momento la necesidad de internarlo en un centro de salud mental. Y él mismo llegó a dudar en muchas ocasiones si lo que escribía era real o ficción”.

“¿Qué pudo suceder en la vida de Strindberg para que en 1884 escribiera una declaración de los derechos de la mujer, que aún hoy resultan avanzados y tristemente inasequibles, y solo un año más tarde renegara de ella? Este es el espíritu revolucionario, terrorista, polémico y extremo que recorre La noche de las tríbadas, una función que no dejará a nadie indiferente”, concluye el director.