El óleo de Pablo Picasso Buste de femme sonriente (1901) se exhibirá a partir de ahora en la sala dedicada a la modernidad de inicios del XX, enfrentado a otra mujer pintada también por el artista malagueño: Mujer en Azul, del mismo año; gracias al depósito realizado por un coleccionista europeo. Esta pintura es, según algunos expertos, una de las más bellas figuras femeninas picassianas.

En esa misma sala se ha situado un óleo de Sorolla, Llegada de la pesca (1899), que ha sido depositado temporalmente por el Museo de Bellas Artes de Asturias, y que estará expuesto junto con los trabajos de algunos de sus coetáneos, como Rusiñol, Iturrino o Darío de Regoyos.

Pablo Picasso. Buste de femme sonriente, 1901

Pablo Picasso. Buste de femme sonriente, 1901.

Otra novedad importante es el cuadro Antro de fósiles (1930), de Maruja Mallo, que pertenece a la serie Cloacas y campanarios, y ha sido adquirida por Cultura para el Museo Reina Sofía. Es una composición donde dominan los colores sombríos y un contenido que adelanta el drama bélico que iba a vivir no sólo España sino también el resto de Europa. También se exhiben del pintor cordobés Antonio Rodríguez Luna (1910-1985) cuatro dibujos que estuvieron colgados en el Pabellón Español del 37.

También en el contexto del Pabellón, en la zona que se muestra Guernica, se ha situado una reproducción, donada al Museo por la Fundación Charlotte Perriand, del mural de Léger y Perriand Joies Essentielles, plaisirs nouveaux (1937), creado para la decoración de los pabellones de Agricultura de Francia en la Exposición Internacional del 37. Este trabajo, enfrentado a la maqueta del Pabellón y a los fotomontajes de Renau, hace referencia al mural fotográfico como medio predilecto de propaganda del Frente Popular francés y español.

Logicofobismo

Junto a las salas que acogen las obras de Dalí se ha montado un espacio monográfico dedicado al Logicofobismo, nombre que deriva de una exposición organizada en mayo de 1936 en las Galeries d’Art Catalònia de Barcelona, en la que se quería ofrecer una visión panorámica de la situación del surrealismo en España que incluyera a Salvador Dalí, Joan Miró y otros artistas más jóvenes. Siguiendo ese esquema se exponen un conjunto de obras, adquiridas en los últimos meses, donde se aprecia una clara influencia de esos dos autores, de Ramón Marinello, Ángel Planells y Arthur Carbonell, entre otros.

En la sala del Exilio Surrealista también se ha incorporado una importante obra de Luis Fernandez (Oviedo, 1900–París, 1973), uno de los pintores asturianos más destacados del siglo XX, titulada Pintura erótica, (1939), depositado por el Museo de Bellas Artes de Asturias.

Asimismo, el visitante podrá ver en una de las salas de la segunda planta del Museo el documental Canciones para después de una guerra del director salmantino Basilio Martín Patino, basada en la España de posguerra. Realizada de manera clandestina en 1971, fue estrenada cinco años después. La película consta de una serie de imágenes de archivo sobre las que se superponen canciones populares de la época.

Narraciones posmodernas

Por último, también se reabre la Colección 3, De la revuelta a la posmodernidad, con nuevos artistas y nuevas narraciones formadas a partir de adquisiciones recientes. Destaca la utilización de los medios audiovisuales y la crítica de la representación por parte de artistas como VALIE EXPORT, Sanja Iveković, Martha Rosler y Eugènia Balcells. De esta última se presenta por primera vez desde su adquisición una importante instalación: Fin/The End (1978-2010), en la que se diseccionan los modelos hegemónicos de género en las fotonovelas, que tanto influyeron en el imaginario sentimental durante el franquismo.

Para celebrar los 50 años de la fundación de Zaj se expone la instalación Lanas (1972-2009) de Juan Hidalgo. Como antecedente de la sala dedicada a los activismos latinoamericanos que se puede ver en Nouvel 0, se incorpora la también reciente compra de Masacre de Puerto Montt, instalación de Luis Camnitzer de 1969, en la que las trayectorias de las balas y los nombres de los ejecutores reconstruyen la masacre del mismo nombre del 9 de marzo de 1969 en Chile.