Al finalizar la guerra, Assía, seudónimo de Felipe Fernández Armesto, recogió sus crónicas realizadas bajo las bombas de la Luftwaffe en dos volúmenes, que no han sido reeditados desde entonces.

El primero de ellos, Cuando yunque, yunque, apareció en 1946 e incluía textos publicados durante la primera parte de la contienda, la denominada ‘fase defensiva’, momento en el que Londres sufre las embestidas de su adversario. El segundo, titulado Cuando martillo, martillo, apareció en 1947 y recogía los escritos publicados a partir de julio de 1943, durante la segunda fase de la guerra, la ‘etapa ofensiva’.

Con sus palabras, Assía ofrecía a sus lectores amenos comentarios e informaciones sobre la sociedad británica y la organización del país que cosecharon un enorme éxito y son un clásico del periodismo de la época. Así, sus narraciones incluían noticias de corte bélico pero también hablaban sobre el funcionamiento de la corona británica, de la retirada de los soldados ingleses de Dunquerque o del sistema escolar vigente en Reino Unido.

Más que una crónica de la guerra, sus relatos son un auténtico retrato moral del único país de Europa occidental que no se dejó doblegar por Hitler. Pero estos artículos también le causaron repetidos problemas con las autoridades franquistas, que llegaron a amenazar con retirarle la nacionalidad.

Gran narrador

Cuando se cumplen 70 años del final de la II Guerra Mundial, Libros del Asteroide recupera los artículos del último superviviente de una brillantísima generación de periodistas que despuntó en los años 30, formada por Manuel Chaves Nogales, Josep Pla, Gaziel, Eugeni Xammar, Corpus Barga y Julio Camba.

El libro recoge un prólogo de Ignacio Peyró en el que ensalza la figura de este narrador nato, recordando curiosidades de su vida y su pluma hasta sus últimas palabras, «al término de sus casi cien años, Augusto Assía podía mirar por el retrovisor y recordar riñas con Goebbels, complicidades con Churchill, visitas al Saint Simeon de Randolph Hearst, clases de Einstein o de Sartre, polémicas con Baroja y Valle-Inclán y tratos con espías soviéticos como Philby o agentes dobles como Garbo», escribe Peyró.

Periodista precoz

Augusto Assía fue uno de los periodistas más influyentes del siglo XX en España. Periodista precoz, publicó sus primeros artículos en 1924 en El Pueblo Gallego, y en ese mismo año ingresó en la Facultad de Filosofía y Letras de Santiago, donde se licenció en 1927. También colaboró con otros periódicos como Ya y La Voz de Galicia

Amplió sus estudios en Berlín, desde donde empezó a colaborar con La Vanguardia, diario en el que escribiría la mayor parte de su vida. En mayo de 1933 fue expulsado de Alemania por el Gobierno nazi, molesto con sus crónicas sobre el nacionalsocialismo y, como consecuencia de ello, le enviaron de corresponsal a Londres, donde se quedaría hasta acabada la II Guerra Mundial (salvo el periodo de la Guerra Civil española).

Posteriormente fue corresponsal en Bonn, Nueva York y Washington. En 1970 se instaló en Galicia, desde donde siguió colaborando con La Vanguardia hasta bien entrada la década de los 80 y donde moriría en el año 2002. Es autor de diversos libros, entre otros, Vidas inglesas (1944), Los ingleses en su isla (1943), Mi vuelta al mundo (1949) y La traición como arte (1995).


Augusto AssíaCuando yunque, yunque. Cuando martillo, martillo
Augusto Assía
Prólogo de Ignacio Peyró
Libros del Asteroide
504 p
24,95 euros