El estilo rápido y directo que tiene Mariela al contarnos su sobrecogedora historia le da un aire de cuento que se transmite en voz baja, de boca a oreja. Algunas de sus frases se pierden en las ideas que van surgiendo a medida que habla y tiene que retomar el hilo un poco más tarde, como si estuviésemos manteniendo una conversación (es un decir) donde solo una de las partes participa activamente.

Los silencios, las preguntas sin respuesta y no llamar a las cosas por su nombre son los pilares que dan forma a la historia misteriosa, envuelta en la niebla, de Es un decir. Si en el cine es tan importante lo que queda fuera de plano como lo que aparece en las imágenes, en el libro de Díaz lo que queda en los márgenes, lo que Mariela no sabe y solo intuye porque nadie se lo cuenta es la clave para entender qué sucede con el pueblo y sus habitantes, con la protagonista y su familia.

Brecha social

La anterior novela de Díaz, Mujer sin hijo, se ambientaba en un momento y lugar inexactos donde lo más patriótico que puede hacer una mujer es tener descendencia. Y si no la tiene, debe atenerse a unas consecuencias que van desde ser repudiada por los que la rodean hasta acabar en la cárcel.

Mujer sin hijo está muy cerca de las distopías y la ficción especulativa, emparentada con El cuento de la criada de Margaret Atwood, pero la historia de Es un decir no necesita lanzar hipótesis; se adentra en la brecha social que existe todavía hoy entre hombres y mujeres.

Ambientada durante la dictadura de Franco, es difícil no ver nexos con la situación actual, marcada por la reforma de la ley del aborto o la violencia machista que no cesa, en Es un decir. «(…) Porque las mujeres de mi generación lo hemos estado haciendo desde que nacimos, obedeciendo a la madre, al padre, a la hermana mayor, al marido, a la hija… y, oye, que una se cansa de estar siempre a la entera disposición de lo que sea», se lee entre sus páginas.

Es un decir es una novela con filo, cortante y brutal pero también tierna y emocionante, por la que fluyen un buen puñado de temas y unos personajes apasionantes, siendo Mariela, la huérfana de vida flaca, una guía excepcional por los recovecos de una historia que va directa a entrañas.

Jenn Díaz publicó su primera novela, Belfondo, en 2011. El duelo y la fiesta salió a la venta al año siguiente y en 2013 lanzó Mujer sin hijos.


es un decir

 

Es un decir
Jenn Díaz
Editorial Lumen
Ficción
162 páginas
16,90 euros
ePub: 9,99 euros

Primer capítulo – Es un decir