La existencia de la canción, formada por 29 compases para una voz de contralto y piano en la bemol mayor, ya era conocida por los estudiosos. Fue vendida en una subasta en 1862 y de nuevo en 1872, pero nunca fue publicada y su paradero desde entonces era un misterio musical. No se sabe cómo llegó a Estados Unidos.

La canción está acompñada de una carta firmada de Mendelssohn dirigida hacia el hombre que encargó la canción, Johann Teichmann, con fecha 3 de mayo de 1842. En ella, el compositor le pide no hacer circular la canción ya que había sido escrita como un encargo privado.

El texto de la canción se extrae de la segunda estrofa el poema de Friedrich Rückert Das Unveränderliche, en el que se compara el corazón humano a una mina que puede producir oro o plata, pero que sólo da lo que ella misma contiene.

Thomas Venning, principal especialista en manuscritos de Christie’s, ha explicado: «El manuscrito se perdió hace 140 años, por lo que parece probable que estemos ante una obra musical de uno de los grandes compositores que ninguna persona viva ha escuchado. Es una canción bastante sencilla, con una pegadiza melodía cadenciosa. No puedo esperar a escuchar su interpretacion».