La segunda parte del informe AEVAL, que se ha dado a conocer hoy, reitera que la "actuación de la SGAE se rige por los principios de transparencia, legalidad, eficacia, equidad y eficiencia" e insiste en que el "sistema actual de gestión colectiva de los derechos de propiedad intelectual es el mejor posible para la defensa de los autores". En la actualidad, más de 97.000 creadores musicales, audiovisuales, dramáticos y coreográficos forman parte de la SGAE.

En su análisis de la percepción pública de las entidades de gestión, AEVAL confirma que entre la población “existe una actitud favorable a la protección de la propiedad intelectual” y apunta a “la confusión existente” entre la opinión pública sobre este asunto. 

La Evaluación también recoge el “consenso total” que existe entre los socios de la SGAE sobre “la necesidad de la existencia de estas entidades, en su carácter insustituible y en la ausencia de alternativas mejores para la gestión de sus derechos”.

El modelo más conveniente

Además, el informe recalca que el modelo de gestión colectiva es el más conveniente porque representa una garantía para los autores: 

“Frente a la alternativa, liberalización del mercado de derechos de gestión colectiva de propiedad intelectual o la prestación de estos servicios de gestión por el sector público, la existencia de un perqueño número de entidades especializadas, reguladas por el Estado parece la solución más conveniente. Un marco legal más regulado que el existente evitaría el riesgo de fragmentación del mercado y de formación de oligopolios privados de oferta en el caso de la liberalización. Y la posible rigidez del sistema y no representatividad de los titulares de derechos en el caso de su gestión pública”.

En su análisis de la gestión de los fondos asistenciales, promocionales y de formación desarrollados por las entidades de gestión, AEVAL señala que la SGAE cumple la normativa que los regula y que los gestiona con transparencia y publicidad, gracias a que lo hace a través de su Fundación Autor.

AEVAL destaca igualmente que en líneas generales el funcionamiento del sistema español de gestión colectiva es muy similar al de la mayoría de países de la Unión Europea.

El funcionamiento del mercado



El último párrafo del informe recuerda que en la actualidad, al contrario de lo que se afirma frecuentemente, “el funcionamiento del mercado de los derechos de propiedad intelectual ha cambiado y ha pasado a estar protagonizado por los grandes propietarios de los contenidos y por las plataformas de distribución basadas en las nuevas tecnologías que utilizan los contenidos como argumento de expansión de su cifra de negocio”.

“Los titulares de derechos, las entidades de gestión y desde luego y sobre todo los consumidores son sujetos pasivos de este conflicto de carácter global con muy poca capacidad para influir en el nuevo modelo de gestión de los derechos de propiedad intelectual que surgirá para armonizar los intereses enfrentados actualmente existentes en el mercado de los bienes culturales”, concluye la evaluación.