La cumbre es una obra que habla de mujeres y de poder, de cómo lo afrontan y cómo se les contempla de un modo especial por ejercerlo. Ante el espectador se presentan dos mujeres que tratarán de resolver sus conflictos individuales y terminarán, irremediablemente, por encontrarse. La obra rememora el enfrentamiento ficticio que narró el poeta Schiller de dos grandes personajes históricos que nunca llegaron a encontrarse: Isabel de Inglaterra y María de Escocia.

En la actualidad el poder está dominado por las finanzas, por la economía, es un poder que se hereda. Por eso Isabel y María son mujeres de empresa y la histórica prisión de María es un psiquiátrico. Recluida en las salas que ella misma fundara un día, aguarda la visita de la única persona que puede salvarla o condenarla. Isabel espera fuera sin decidirse a entrar. El encuentro tendrá que producirse.