La muestra, comisariada por María Toral, ha sido realizada en exclusiva para Valladolid y no viajará posteriormente a otras ciudades. Todos los artistas representados han expuesto ampliamente y no necesitan en realidad una exposición suplementaria. A pesar de ello, como recuerda Jean Frémon, fundador y actualmente presidente de la galería, «si he sentido a menudo que los artistas prefieren formar parte de una exposición colectiva más que gozar de una exposición personal-aventura en solitario. Estar confrontados a sus iguales, a sus mayores, a los más jóvenes, a sus amigos o a sus rivales supone un ejercicio estimulante que les gusta». Además, «todos ellos han aceptado con entusiasmo la invitación de exponer juntos bajo el estandarte de su galería en Valladolid».

Varias generaciones se suceden, década tras década: los arabescos irónicos de Pierre Alechinsky o los ensamblajes audaces y llenos de misterio de Jannis Kounellis; los equilibrios sutiles y refinados de Rebecca Horn y las abstracciones geométricas de Sean Scully; la libertad y la gracia de Günther Förg junto a los paisajes abstractos y puros de Etel Adnan; el gesto firme y elegante de David Nash inscrito en madera o papel; las grandes composiciones luminosas de Nalini Malani; las figuras silenciosas Kiki Smith o Jaume Plensa; las composiciones febriles de Toguo…