A pesar de que el presupuesto ha aumentado hasta los 250.000 euros, Frinje16 verá reducidos los días que estará activo de 23 a 16, y también desciende el número de compañías. Según explica José Manuel Mora, el aumento del presupuesto se destinará a aumentar el caché de las compañías, que pasa de 1.200 y 1.500 a 3.000 euros, y en ayudas a la creación, fomentando así la calidad y apostando por los nuevos creadores, por lo que se estrenarán siete proyectos.

Las propuestas escénicas han sido elegidas, entre 800 solicitudes llegadas desde 20 países, por una comisión artística que formada por Marion Betriu, coordinadora artística de Frinje Madrid; Marcia Dias, directora artística Festival Tempo de Río de Janeiro y productora; José Manuel Mora, dramaturgo y coordinador artístico de Frinje Madrid; Tiago Rodrigues, creador y director artístico del Teatro Nacional D. Maria II de Lisboa, y José Antonio Sánchez, catedrático, investigador y autor de numerosos textos críticos sobre las artes escénicas.

Pasado, presente y futuro

La Banda del fin del mundo. Foto: Leo Castro.

La programación se divide en tres bloques principales centrados en los conceptos de Pasado, Presente y Futuro. El primero reúne los trabajos diferentes compañías que vuelven la mirada atrás para reflexionar sobre la construcción del presente: toda una serie de viajes a la memoria más íntima y personal que ayudan a comprender las raíces y cambios sociales. En estas piezas, los creadores cuestionan su identidad, personal y colectiva, a través de la transformación de materiales biográficos en ficción escénica.

Entre las obras destacadas en esta sección están La Blanca (3 y 5 de julio) de la Compañía La increíble, un teatro disfrazado de conferencia con aspiraciones de monólogo y voluntad de confesión; Testigo de las ruinas (8 y 9 de julio), un acto de despedida a cargo de la compañía colombiana Mapa Teatro; o MODËRNA, de La Belloch Teatro, que indaga en los tópicos de la escena contemporánea más vanguardista desde la mirada de Lola Cordón, actriz octogenaria con una sólida y reconocida trayectoria a su espalda.

Modos de vida

En Presente, Frinje16 aúna propuestas de compañías que cuestionan los modos de vida contemporáneos, sus vicios y miedos desde ópticas multidisciplinares como la danza y la música y atravesadas por el humor. Esta sección se abre los días 1 y 2 de julio con Herederos del ocaso (Crónicas Ibéricas II), de Club Caníbal, que cuenta la historia de Juan Alegría, un deportista fracasado que quiere ganar una medalla en los Juegos Paralímpicos de Sídney. Otras propuestas son El resistente y delicado hilo musical (2 y 3 de julio), de Amalia Fernández; Wasted (7 y 8 de julio), de Íntims Produccions; Homo Ridens_Madrid (9 y 10 de julio), de Teatro Sotterraneo, o BBBB (15 de julio), de Agrupación Sr. Serrano.

Por último, en Futuro dialogan piezas escénicas que imaginan lo que vendrá. Así lo hacen obras como Lichen-man (1 y 2 de julio), de Frédéric Sonntag y la AsaNIsiMAsa Company, en la que se retoma el mito del superhombre; La Banda del fin del mundo (16 y 17 de julio), con la que la compañía loscorderos.sc ofrece una desconexión del mundo tal y como lo conocemos; o Apocalypse Uploaded (12 y 13 de julio), donde LAminimAL se pregunta ¿cuánto hay de imaginación en los relatos que conforman nuestras identidades?

Talleres, música y más

Durante el transcurso del festival se desarrollarán una serie de laboratorios escénicos destinados a los amantes del teatro y a jóvenes profesionales. Agrupados en la sección Procesos, con ellos el Frinje16 aspira a ser un lugar para la formación y reflexión teatral. Estos son Etnoficciones: Poéticas de lo real (6 de julio), una muestra del laboratorio de creación impartido por Mapa Teatro; Amor líquido (16 de julio), impartido por Cibele Forjaz; Entonces baila (16 de julio), por Laura Szwarc en colaboración con Intermediae; En busca de una nueva identidad (17 de julio), laboratorio de creación de Falk Richter, Nils Haarman y Nir de Volff; y Pícnic (17 de julio), que imparte Rocío Bello, Carlos González y Miguel Rojo en colaboración con la Escuela Municipal de Arte Dramático de Madrid e Intermediae.

Lost Dog. Cal y Canto Teatro.

Los más pequeños también contarán con experiencias singulares dispuestas a estimular su imaginación con el apartado de Nuevos Públicos. Se han preparado talleres relacionados con la música y la expresividad diseñados para los niños: Corroc (2 y 3 de julio), de Escarlata Circus, está concebido como una visita guiada a una colección de piedras con formas de corazón que cobran vida y explican historias; Música para bebés (2 y 3 de julio), un taller a cargo de la Escuela de Música Creativa; Lost Dog (9 y 10 de julio), espectáculo de títeres y objetos de Cal y Canto Teatro; Iniciación a la música electrónica para niños (9 y 10 de julio) de David Crespo; Trípula (16 y 17 de julio), un viaje apacible y poético de Farrés Brothers i Cia, y el concierto acústico de LaliBeGood (17 de julio).

Matadero Madrid también estará plagada de música con cinco conciertos acústicos y de pequeño formato para sobrellevar el calor de julio y disfrutar de las noches de verano: Lu Rois (1 de julio), Nicola Cruz (5 de julio), Paul Fuster (6 de julio), Aurora & The Betrayers (12 de julio) y Soledad Vélez (13 de julio).

La programación se completa con los Cócteles: el 2 de julio se reunirán Mark Ravenhill con Carolina África, María Folguera, Frédéric Sontag y Carlos Tuñón; el 9 de julio, Mapa Teatro con Cibele Forjaz, Roger Bernat y Marc Caellas, y el 17 de julio, Falk Richter, Nils Haarman y Nir de Volff.