La casa.

La casa.

«Este año proponemos observar la construcción de un lugar que habitar, donde sentarse, mirar, hablar y escuchar. Queremos ser capaces de hacer casa juntos, de vincularnos a través de un territorio que decidimos común, de construir un espacio para el encuentro y, además, creer todavía en la posibilidad de seguir contándonos unos a otros», explican los comisarios, Carlos Marquerie y Emilio Tomé.

La programación está acompañada de lugares para la reflexión y el acercamiento entre los artistas y el público. El Teatro Valle-Inclán acogerá cinco espectáculos que se completarán con Vermú de los domingos (en la Sala Mirlo Blanco), una actividad en la que el público asistente podrá tomar esta bebida mientras asiste al diálogo de los artistas que presenten sus trabajos cada semana.

El 21 de septiembre se abre este encuentro con Songs from my shows, un espectáculo del performer Ivo Dimchev (1976) en el que ofrece uno de sus famosos conciertos. Mientras que los días 23, 24 y 25 deleitará al público con Som faves, una obra que tendrá lugar en un espacio blanco, desierto, en el que armado con una peluca y un teclado, Dimchev edifica un mundo propio y presenta una aparentemente inconexa colección de paisajes que, sin embargo, van dibujando gradualmente un retrato íntimo.

La ex yudoca Aitana Cordero llegará del 29 de septiembre al 1 de octubre con el estreno absoluto de La casa, una idea original de la artista con la dramaturgia de Jaime Conde-Salazar. Otro estreno será Contar para/sobre vivir 1 (6 y 7 de octubre) y Contar para/sobre vivir 2 (8 de octubre), dos obras para las que se ha invitado a cuatro creadores a acercarse a las ideas de relato y de casa. Estos, Alejandro G. Ruffoni, Itxaso Corral, Pablo Messiez y la Orquestina de Pigmeos (Nilo Gallego y Chus Domínguez), han realizado una serie de piezas dispares entre sí pero que constituyen juntas un relato que aproxima al entendimiento del mundo.

Som faves. Ivo Dimchev.

Som faves. Ivo Dimchev.

El Teatro Pradillo se suma un año más a esta iniciativa acogiendo dos piezas. El día 1 y 2 de octubre se representará Veracruz, nos estamos deforestando o cómo extrañar Xalapa, una obra que forma parte del proyecto La democracia en México 1965-2015, y en la que se ve de cerca el problema acallado de un estado de la República Mexicana que lleva casi doce años gobernado por una alianza entre los narcotraficantes y los políticos y, desde la tercera década del siglo XX, no ha tenido otro partido en el poder que el PRI.

Por otro lado, del 13 al 16 de octubre será el turno de La conquista de lo inútil, de la compañía L’Alakrán, el proyecto artístico de Óscar Gómez Mata. La conquista de lo inútil es el nombre dado a una dinámica artística de pensamiento que se inició a finales del 2014 en la que se hace hincapié en aquello que normalmente no se considera como relevante: el arte, las ciencias, la reflexión, la transmisión, el placer, por ellos mismos, porque nos hacen mejores.

Finalmente, el Centro de Arte Dos de Mayo (CA2M, Móstoles) acogerá el 5 de octubre la performance Cuarto de hora de cultura metafísica, también de la compañía L’Alakrán. Comenzará realizando un prólogo con imágenes en las que se introduce un discurso político entremezclado con reflexiones personales, y proyectando un vídeo que muestra «adeptos» practicando el entrenamiento en diferentes lugares destacados de la ciudad de Ginebra. La performance termina con la aparición de un grupo de personas, representando a diferentes asociaciones sociales, que junto con los actores realizan el entrenamiento completo.