En sus poquito más de dos décadas de trayectoria profesional, Peyroux se ha creado un universo musical propio, de mucha poesía melódica y vocal, pero también de mucha inventiva creativa.

Aupada como está a los altares del jazz más aplaudidos, esta ya icónica cantautora ha sumado en este tiempo a su literatura jazzística mucho talento compositor, como queda reflejado en algunos de sus discos más recientes.

Mucho y todo ha cambiado desde que se descubriese al mundo una de las mejores prolongaciones vocales de la gran Billie Holiday, siendo hoy una de las damas más representativas de la escena jazzística, por más que ella no haga ni quiera hacer jazz académico al uso.

Lo suyo siempre fue el blues, y no pasa nada, al contrario, que ya se sabe también es jazz y como decía Tete Montoliu, “el blues lo es todo”.

En su último disco, Secular Hymns, grabado en una iglesia del siglo XII de Oxfordshire, vence y convence al dar vida nueva a temas de blues y el cancionero americano como Willie Dixon, Sister Rosetta Tharpe, Tom Waits o Allen Toussaint.

Intérpretes. Aram Bajakian (guitarra y voz), Andy Ezrin (teclados y voz), Paul Frazier (bajo y voz) y Graham Hawthorne (batería y voz)