El núcleo de la muestra, comisariada por Érika Goyarrola (Bilbao, 1984), lo forman piezas contemporáneas –con una significativa representación de la Colección ”la Caixa”– en relación con obras de otras épocas y contextos diversos.

El objetivo último del proyecto es resaltar la capacidad de conmover que tiene el arte contemporáneo frente a aquellas posiciones que lo sitúan en un terreno más racional o preeminentemente político. Así, las obras seleccionadas muestran cómo son transformadas las emociones básicas comunes a la experiencia humana en emociones estéticas representadas por medio de gestos, signos y formas que sobreviven a lo largo del tiempo. Un total de 43 obras de 21 artistas que recorren los últimos 500 años de la historia del arte.

'Poètiques de l’Emoció' al Caixaforum Girona. Pere Duran / Nord Media.

Shirin Neshat, Turbulent, 1998. Colección ”la Caixa” De Arte Contemporáneo. © Shirin Neshat.

Algunos de los nombres que participan en la muestra son Bill Viola, Joan Miró, Colita, Pipilotti Rist, Carla Andrade, Julio González, Esther Ferrer, Darío de Regoyos, Enric Folgosa, Perejaume, Shirin Neshat, Manolo Millares, Bas Jan Ader, Esteban Jordán, Juan Uslé, Ramon Padró Pijoan, Iván Argote, Francesca Woodman, Francisco Giralte o Jeremy Deller. Para su realización se ha contado con la colaboración de 15 prestadores, entre instituciones, galerías y algunos de los propios artistas representados.

En la historia

La exposición se divide en tres ámbitos y presenta en cada uno ellos tres modos distintos en los que la emoción se ha mostrado en la historia del arte. El primer grupo ahonda en la emoción del sujeto a partir de la representación expresiva de los personajes protagonistas, a través de obras contemporáneas y piezas de arte religioso que expresan dolor o tristeza.

El segundo presenta un conjunto de piezas en las que la emoción se expresa de forma metafórica gracias a la traslación del estado anímico del artista al paisaje y a la arquitectura representados.

Finalmente, un tercer ámbito analiza la forma en que el arte se apropia de la emoción que vertebra el campo social, desde los movimientos sociales y la política hasta la esfera de la fiesta o las celebraciones populares. Estas obras tratan las emociones compartidas a partir de imágenes que representan la fuerza de la protesta o el gozo de la celebración.

Bill Viola, The Silent Sea, 2002 © Bill Viola. Fotografía de Kira Perov.

Bill Viola, The Silent Sea, 2002 © Bill Viola. Fotografía de Kira Perov.