Nacido en Pamplona en 1905, Lizarraga estudió pintura en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, donde fue alumno de Cecilio Pla, Manuel Benedito y Romero de Torres. Tras una estancia en París, en 1930 se casó con la pintora Remedios Varo, una de las pintoras surrealistas más relevantes del siglo XX, con la que se instaló en Barcelona. Allí desarrolló todas sus posibilidades creativas. Se empleó como escenógrafo de la ópera Pedro Mari (Canción de libertad) y fundó el Sindicato de Dibujantes Profesionales de Barcelona, adscrito a la UGT. También ganó varios premios en varios concursos de carteles y participó en la puesta en marcha de EA Films, productora con la que realizó varios cortometrajes y algún largometraje como, en plena guerra, Don Do-Re-Mi-Fa-Sol-La-Si-Do de José Fogués.

Tras el estallido de la guerra se alistó en el Ejército de la República. Al término de la contienda, y al igual que miles de españoles, huyó a Francia, donde fue recluido en el campo concentración de Argelès-sur-Mer, primero, y de Agde y Clermont Ferrand, más tarde, hasta que en 1941 fue liberado gracias a las gestiones de su esposa.

En 1942 logró un visado para viajar a México, país en cuya vida cultural se integró plenamente al igual que otros muchos artistas europeos del exilio, como la propia Remedios Varo, Benjamin Perte, Katy y José Horna, Leonora Carrington o Chiki Weisz. En 1946 se casó con la fotógrafa tudelana Ikerne Cruchaga, con la que tuvo dos hijos, Xabier y Amaya. En su país de adopción desarrolló una intensa labor artística tanto en el terreno de la ilustración como de la pintura. En 1957 participó como director artístico en el rodaje de The sun also rises, de Henry King, realizando además todas las pinturas taurinas que aparecen en la película. Gerardo Lizarraga falleció en 1982 en México.

En la muestra también se puede realizar un recorrido por la que fue su trayectoria artística a partir de su llegada a México a través de retratos, paisajes, proyectos para murales y numerosos trabajos de ilustración en los que combinó temáticas de su país de origen y del de acogida. La pelota y las danzas vascas protagonizan muchas de sus obras, de la misma manera que lo hacen los mercados o los músicos mexicanos.

Gerardo Lizarraga. Artista en el exilio recupera además una de las facetas menos conocidas de Lizarraga, la que lo vincula al mundo del cine. En este terreno trabajó como director artístico, productor, director e incluso actor. Una colección de más de 150 documentos originales y fotografías relacionadas con su vida y obra completan la exposición. A través de ellos se descubren numerosos detalles de lo que fue la vida en los campos franceses, los viajes en los barcos del exilio, sus proyectos artísticos, su vida en México y su experiencia como artista primero y como artista en el exilio después.

Casi todas las obras que conforman la exposición fueron conservadas por el propio Lizarraga en México. Sus hijos han preservado estos trabajos que ahora se exponen. La muestra incluye también varias obras de Lizarraga propiedad del Museo de Navarra, así como otras de colecciones particulares y documentos de archivos privados. También se incluye un cartel original realizado en 1930 propiedad del Archivo Municipal de Pamplona.

Visita virtual a la exposición con la opción de ser guiado por su comisaria.

Actividades paralelas

Con motivo de la muestra se han programado actividades complementarias gratuitas que han permitido acercarse a la figura de Lizarraga desde distintas perspectivas. Así, el Museo de Navarra acogió un ciclo de conferencias que se pudo seguir bien presencialmente o en línea:

– Blanca Oria, periodista y comisaria de la exposición: Gerardo Lizarraga y el proyecto de documentación y difusión.

– José Miguel Gastón, Félix Segura, Javier Jiménez, Susana Leoné: Recuperación y tratamiento de archivos. El fondo Lizarraga, un ejemplo.

– Iñaki Urricelqui: Un artista navarro transterrado.

– Blanca Oria entrevista a Xabier Lizarraga (conexión desde México).

– Juan Zapater: La vida en un veinticuatroavo de segundo.

También se proyecta en el salón de actos del Museo el documental Estrellado (2018), dirigido por Blanca Oria y en el que se recoge la vida y obra de Lizarraga, pero también la época que le tocó vivir. Última proyección: 22 de mayo. 17.30 h.

Las visitas guiadas para el público general tienen lugar los domingos a las 11.30 y a las 12.30 h. La recogida de invitaciones se puede realizar en la taquilla del Museo el mismo día desde las 11.00 h.