Comisariada por Juan Manuel Martín Robles, director del MUREC y de la Fundación, y Bienvenido Simón Robles, conservador, esta muestra ofrece una visión diacrónica del arte español actual a través de 16 obras de otros tantos artistas de diferentes generaciones, pero con un nexo en común: la pintura en la calle y el paisaje urbano. Creadores que, en sus obras, amplían las fronteras estéticas y conceptuales del realismo, del paisaje urbano y del concepto de habitabilidad.

Jesús Ibáñez. ‘Chopos de las Vistillas’, 2009. Óleo sobre lienzo.

Tomando como punto de partida la figura de Antonio López, creadores de generaciones distintas dialogan sobre la realidad y la visión de la ciudad. Sus panorámicas o vistas de ciudades son fruto de una pintura que contacta con la realidad, donde pintar se convierte en un acto cotidiano que se materializa en el espacio público, en sus calles, plazas…, que se transforman por un tiempo en estudios.

Del complejo y rico panorama de la pintura realista actual también se han seleccionado obras recientes de artistas que trabajan el paisaje urbano y establecen vínculos con partes concretas de la ciudad, aquellas impregnadas de sus recuerdos y experiencias. La pintura se define en estos casos en relación con la convivencia con el contexto inmediato, eliminando las barreras entre obra y espectador para involucrarlo en esa realidad.

Evolución

Después de los realistas de Madrid, diferentes creadores comenzaron a desarrollar sus universos pictóricos y sus inquietudes en la década de 1970, al acudir a las clases de Antonio López, como Jesús Ibáñez, Clara Gangutia o José María Mezquita, quienes conformaron la conocida como segunda generación de realistas. Pero pronto apareció una tercera generación, con autores como Félix de la Concha, Gerardo Pita o Carlos Morago, quienes exploran la realidad desde otras poéticas y otros caminos.

Javier Bassecourt. ‘Cuatro palmeras’, 2022. Óleo sobre lienzo. Colección del artista.

Por último, una nueva generación tiene estrecha relación con los talleres de pintura contemporánea organizados por Antonio López y Andrés García Ibáñez en la localidad almeriense de Olula del Río desde el año 2012, o con la Cátedra Francisco de Goya de Caja Ávila. Este contacto mediante talleres se configura como una experiencia formativa y vital para jóvenes como Javier Bassecourt, Alberto Martín, Eduardo Millán, Carmen Chofre, Rocío Cano, Fernando Devesa, Jorge Gallego, David Martínez Calderón o Jorge Abbad.

David Martínez Calderón. ‘Un día de niebla’, 2024. Óleo sobre lienzo. Colección del artista.

En suma, esta exposición ofrece un recorrido por la visión del paisaje urbano actual de 16 artistas que comparten experiencias, formaciones e investigaciones y que, partiendo de lo más cotidiano, visibilizan las realidades latentes de nuestras urbes.

Desde diferentes poéticas, generando un discurso en evolución y estableciendo diálogos, todos ellos demuestran que la pintura realista se encuentra en auge y maduración, abriendo nuevos caminos en el arte.

Los protagonistas

De izquierda derecha. El comisario Bienvenido Simón Robles; Fernando Giménez, vicepresidente 2º de la Diputación de Almería, y Juan Manuel Martín Robles, director del MUREC y cocomisario.

Antonio López (Tomelloso, 1939), José María Mezquita (Zamora, 1946), Jesús Ibáñez (Valencia, 1947), Gerardo Pita (Madrid, 1950), Clara Gangutia (San Sebastián, 1952), Carlos Morago (Madrid, 1953), Félix de la Concha (León, 1962), Javier Bassecourt (Córdoba, 1974), Alberto Martín (Orense, 1974), Rocío Cano (Jerez de la Frontera, 1978), Fernando Devesa (Cádiz, 1978), Eduardo Millán (Jerez de la Frontera, 1979), Carmen Chofre (Sevilla, 1979), Jorge Gallego (Sevilla, 1979), David Martínez (Jaén, 1982) y Jorge Abbad (Madrid, 1987).

José María Mezquita. ‘Cardenal Cisneros’. Acuarela sobre papel.