- hoyesarte.com - https://www.hoyesarte.com -

Albert Oehlen, sobre el collage y la libertad

Albert Oehlen es uno de los artistas más controvertidos de la Alemania de posguerra. Su estilo pictórico, inconfundiblemente contemporáneo, se nutre de técnicas provenientes de la industria de la publicidad, de la pincelada expresionista, del gesto surrealista y de imágenes generadas por ordenador.

Oehlen es un artista conceptual que emplea la pintura como medio y ha contribuido con su obra -es decir, precisamente pintando- al debate sobre la muerte de la pintura que resurge cada cierto tiempo desde mediados del siglo XX.

Sobre la interpretación de su trabajo afirma: “Que cada uno piense lo que quiera. Me aburre hablar de significados. No busco entendimientos ni complicidades con el público. Cada cual es libre de sus sensaciones”.

Libertad artística

En los últimos años, sus pinturas han desarrollado lo que él define como su tema principal, la libertad artística, algo que se evidencia en su valentía al abordar el lienzo, empleando nuevas técnicas que conservan el vocabulario del pasado y despiertan la extraña, paradójica sensación de que se trata de algo nuevo, pero familiar.

Esta exposición, integrada por tres series, dos autorretratos y un collage-pintura de nueva creación, no pretende ser una retrospectiva al uso, sino una declaración artística. La primera de las series es abstracta y data de los años ochenta; la segunda se compone de obras realizadas por ordenador en la década de los noventa, y la tercera, comenzada en 1989 y aún en proceso, versa sobre el tema de los árboles.

La muestra explora “hasta qué punto somos capaces de ver detrás de la imagen”. Si bien las pinturas seleccionadas para esta muestra son formalmente diferentes en primera instancia, las tres series poseen un núcleo común que las relaciona y permite que se establezcan vínculos entre ellas.

En el trabajo de Oehlen, la imagen se convierte en ironía e insinuación. En un gesto aparentemente diletante, de «mala pintura», con sus obras derriba los ideales de la pintura clásica de manera radical y permanente. Esta franqueza pictórica se refleja también en la temática abordada por el artista.