Junto a ellas hay una numerosa selección de materiales del Fondo del Archivo y Biblioteca del Museo, además de filmes, documentales, programas de televisión, revistas, cómics, fanzines, trabajos artísticos y ejercicios antiartísticos, entre otros materiales. La muestra ha sido desarrollada en el marco de la red L’Internationale, que invitó a los seis museos europeos que la integran a hacer una revisión de los años 80 en sus respectivos contextos, y visibiliza algunas historias desatendidas, suscita preguntas y cuestiona qué se oculta tras la narrativa oficial y cómo se han articulado los discursos dominantes.

El proyecto comisariado por Teresa Grandas aborda una serie de acontecimientos históricos de orden social, político y económico, al tiempo que presenta el trabajo de algunos grupos, activistas culturales y artistas que se posicionaron en la subversión y la crítica al orden establecido.

El relato oficial de los años 80 en España priorizó la necesidad sobre la razón y consolidó una mirada que privilegiaba el futuro antes que el análisis del pasado reciente, obviando cualquier consideración crítica respecto a la filiación con el poder franquista. «El imaginario popular de aquellos años redunda en clichés de modernidad, consolidaciones democráticas, avances y cultura, mucha cultura», asegura Grandas.

Instrumento de promoción

La cultura fue utilizada como un instrumento de promoción para ofrecer una imagen de un país que había superado una dictadura, que había consolidado la democracia y que se había vuelto cosmopolita. Si hasta entonces España se había caracterizado por la carestía de instituciones culturales que promovieran el arte y la creación contemporáneas, ahora se intentaba compensar ese vacío impulsando becas de creación, espacios para el arte joven, equipamientos de gran envergadura como el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, la feria de arte ARCO, festivales y todo tipo de eventos.

En Barcelona, ​​este momento prefiguró la transformación urbanística de la ciudad a raíz de su proclamación como sede de los Juegos Olímpicos y se recuperó la idea de crear el Museu d’Art Contemporani. Gelatina dura no pretende rebatir o rechazar los logros alcanzados, sino que se plantea como un espacio de confrontación de hipótesis, más que como un marco-tesis.

En palabras de la comisaria, «la gelatina dura no existe, es precisamente algo opuesto a su propia cualidad, pero explicita muy bien la imagen amable y muy digerible que se vendió de los años 80 en ese momento y que aún perdura». La exposición esboza microrrelatos y algunas aproximaciones críticas en un recorrido temático que, lejos de querer ser exhaustivo, lo que se propone es indicar algunas líneas de análisis en un marco complejo que resultan especialmente interesantes vistas desde el contexto actual.

El recorrido se estructura alrededor de siete posibles relatos: La memoria olvidada, sobre la antihistoria, la contrainformación y el olvido del pasado reciente; Los ángulos ciegos, de los grupos autónomos a la institucionalización democrática; Del mono azul al cuello blanco, de la desarticulación de los movimientos obreros a la reconversión industrial; En el barrio de mis sueños, del urbanismo feroz a la ciudad espectáculo; Los hermosos vencidos, sobre drogas y prisiones; Las letras arrebatadas, la contracultura versus la institución arte; y El estado gaseoso, sobre la otredad y el escapismo como arma, el mundo imaginado.

Participantes

5QK’s (Alfonso de Sierra, Luis Escribano, Ramón Massa, Ces Marti y Enric Bentz); Francesc Abad; Agustín Parejo School; Marcel·lí Antúnez; Txomin Badiola; Antonio Beneyto; Miguel Benlloch; Tino Calabuig; Alan Carrasco; Colita; Societat U de Barcelona (Octavi Comeron, Tere Badia, Jorge Luis Marzo, Guillermon Trujillano, Montse Romaní); Pepe Espaliú; Marcelo Expósito; Daniel García Andújar; Joan Gelabert; Eulàlia Grau; Isaías Griñolo y Angustias García; Federico Guzmán; Joaquim Jordà; José Juan Bartolomé y Cecilia Bartolomé; Lluís Juncosa; Manolo Laguillo; Rogelio López Cuenca; Laia Manresa; Muntadas; Nazario; Ocaña; Antón Patiño; Carlos Pazos; Pere Portabella; Preiswert; Manolo Quejido; Joan Rabascall; Arturo-Fito Rodríguez, Gabriel Villota; Pedro G. Romero; María Ruido; Fernando Ruiz Vergara; Pepe Sales; Mireia Sentís; SIEP (colectivo artístico); Llorenç Soler; Albert Subirats; Carlos Taillefer; Taller Llunàtic; Steva Terrades; Francesc Torres; Adrià Trescents, Isidoro Valcárcel Medina; Jordi Valls; Ventura Pons; Vídeo-Nou; Jaume Xifra y Zush.