Es verdaderamente desesperante; seis noches sin pegar ojo. Las microsiestas sentado en el inodoro, preparando un té de tilo o subiendo al colectivo se...
A decir verdad, durante muchos años y entre muchos otros artificios, yo tuve que quitarme el rostro cada noche, y ocultarlo debajo del colchón...
Cuando la comisaria Martínez, famosa criminóloga, y su compañero de la científica, Nelson, recibieron por radio la noticia de un posible asesinato en el...
Lo sintió como una flojera del lado izquierdo -un cosquilleo apenas desagradable- que atribuyó a las tardes de planchado eternas de lunes a sábado....
Aquella era la curva doscientos quince del trayecto. Las tenía bien contadas y sabía que solo restaban veinte para llegar a su destino. El...
A los siete años escribí que, en otoño, el frío sube desde el dedo gordo del pie hasta el corazón. Y que con un...
El niño indaga con ambición los entresijos de la tierra húmeda. Busca lombrices que luego romperá en dos partes para verlas retorcerse como si...
Llegué a la terminal de trenes a las ocho de la noche como todos los viernes que viajaba a mi ciudad. El servicio que...
Mi madre me había regalado un jersey de muerto. Convenientemente planchado, desinfectado y con olor a naftalina…, y ese tufo imperceptible que sobrevive a...
Jadeaba. De cara a la tierra, jadeaba. El sol del mediodía me quemaba la mollera, sumándole que había empezado a sentir un ardor insoportable...