Vania, cuyo elenco reúne algunos de los nombres de mayor peso de la escena valenciana, como Rafael Calatayud, Empar Canet, Josep Manel Casany, Àngels Fígols, Mamen García y Rebeca Valls, habla sobre temas universales: el tiempo perdido, la vida que se escapa y las oportunidades que dejamos escapar sin siquiera darnos cuenta.

Alfaro realiza una minuciosa interpretación de la pieza que parte de un primer Tío Vania que el director realizó en 2008 para el Centro Dramático Nacional. En este nuevo montaje ha querido otorgarle una mayor fuerza al texto, poniendo en primer plano a los personajes y defendiendo, según sus propias palabras, “una lectura del mundo de Chéjov de lo que está a punto de pasar, con unos protagonistas desesperados por el cambio”.

Para Alfaro estamos ante un libreto muy actual, muy vivo y emotivo, ya que “Chéjov huía del protagonismo; aquí creó una pieza coral en la que todos los personajes tienen una historia que contar; él habla a través de las escenas, no de los personajes”, asegura el director.

Diferentes maneras de vivir

Los personajes de la obra, «liberados en esta propuesta de cualquier subordinación al tiempo y al espacio en que fueron creados, exhiben, de manera cada vez más impúdica, a medida que sus anhelos y sus frustraciones se van desplegando ante los ojos y oídos del espectador contemporáneo, unos conflictos, aparentemente triviales, pero que ocultan, bajo esa tranquilizadora capa de inocuidad, un desazonante pesimismo”, explica Rodolf Sirera, traductor de la pieza.

La historia sucede en África subtropical. Hace sol y llueve de puertas adentro. El Profesor, recién jubilado, se muda a una casa de campo junto a su joven esposa, Elena. En la casa viven Sonia, hija de un primer matrimonio del Profesor; la “Maman”, madre de aquella primera esposa ya fallecida; y Vania, tío de Sonia, hijo de la “Maman” y cuñado del Profesor. Junto a ellos está también presente el Doctor, quien, además de hacerse cargo de las cuestiones de salud de la comunidad, es un ecologista adelantado a su tiempo.

Con la llegada del matrimonio, la vida en la casa sufre un gran trastorno. El Doctor, cautivado por la belleza de Elena, menudea las visitas a la casa y abandona sus obligaciones y devociones. También Vania es víctima de la dejadez y la figura del Profesor le lleva a ser consciente de que ha echado su vida a perder. Sonia suspira por el Doctor, quien, al igual que Vania, bebe cada vez más. La “Maman”, entre tanto, vive en su mundo particular, expresado en su veneración juvenil hacia el Profesor, sus ensoñaciones francesas y su piano. En el encuentro de estas maneras tan diferentes de vivir se producirá sobre el escenario un auténtico cataclismo a escala familiar.

  • De miércoles a viernes a las 20.30 h. / Sábados a las 18.30 y 22.00 h. / Domingos a las 19.00 h.
  • Encuentro con el público: 11 y 17 de marzo.

Clásico del teatro moderno

Tío Vania fue estrenada en el Teatro del Arte de Moscú en 1899, bajo la dirección de Stanislavsky y Nemirovich-Danchenko. Olga Knipper, con quien Chéjov contraería después matrimonio, encarnó el papel de Elena. Pasados dos años, tras la mala acogida que las representaciones de Tío Vania y Las tres hermanas tuvieron en San Petersburgo, Chéjov valoró la idea de despedirse del teatro.

Según el dramaturgo ruso, “uno puede escribir teatro en Alemania, en Suecia o incluso en España, pero no en Rusia, donde los actores no son respetados, donde son atacados brutalmente, donde no se les perdona ni el éxito ni el fracaso”. Con su característico humor patético, Chéjov pone el foco sobre una serie de personajes que, mientras hacen y dicen, representan una auténtica comedia humana.

El dramaturgo ruso amaba sin límites a sus protagonistas corales, los observaba metódicamente, con comprensión e inteligencia y, a través de sus palabras, pero también de sus silencios, exploraba las grandes cuestiones de la vida. Con Tío Vania, el autor habla sobre los vestigios de lo no dicho y de lo no hecho. Sobre lo soñado y lo deseado que no han llegado nunca a ser, pero que se percibe en las miradas y en los gestos de cada ser humano.