El proyecto, obra del arquitecto sevillano Guillermo Vázquez Consuegra, recupera el edificio para el siglo XXI con un uso cultural compatible con los valores del monumento, que incluye, fundamentalmente, el recinto arqueológico excavado y el espacio libre de las atarazanas para la visita cultural, una sala polivalente con usos didácticos en la planta baja y espacios expositivos en la primera planta.
La actuación ha estado encaminada al reconocimiento, recuperación, restauración y puesta en valor de todas y cada una de las etapas históricas y constructivas que han ido conformando el monumento que ha llegado hasta nosotros. Se ha intervenido en todo el inmueble (12.607,8 m² construidos) a efectos de conservación y se ha adecuado para el uso cultural la planta baja y parte de la primera planta (8.625,2 m² útiles).
Ha sido muy relevante la recuperación del muro de barbacana, la consolidación de las fábricas de ladrillo y azulejo, el mantenimiento de las cerchas originales de madera, la impermeabilización de las cubiertas y la conservación de los elementos de fundición originales. En la búsqueda por encontrar un uso compatible con sus valores patrimoniales, se ha impulsado la conversión de las Reales Atarazanas de Sevilla en un espacio cultural, un gran contenedor que en esta ocasión también es el contenido.
Tras la culminación de las obras de restauración y su presentación pública, las Reales Atarazanas acogerán próximamente y de forma temporal unas jornadas de puertas abiertas para brindar al público de la ciudad de Sevilla la posibilidad de visitar el espacio y descubrir el resultado de este proyecto acometido por la Junta de Andalucía y la Fundación ”la Caixa”.
Posteriormente, la Fundación Cajasol, cesionaria del espacio, llevará la ejecución del plan museográfico para desarrollar en este nuevo centro cultural una programación con actividades de difusión y zonas expositivas que tendrán como eje principal la relación de Sevilla con el río Guadalquivir y el Nuevo Mundo, convirtiéndose en un reclamo más del polo cultural que conforman el Teatro de la Maestranza, el Hospital de la Caridad y las propias Atarazanas en el barrio del Arenal de la capital hispalense.






















