El Festival de Teatro Clásico de Mérida se llena de farsa, del 5 al 9 de agosto, de la mano de Echanove, que participa en esta cita veraniega en su faceta menos habitual, la de director, que sólo había puesto en práctica con Visitando al señor Green (2005) y Conversaciones con mamá (2013). Lo hace con una comedia universal en la que un grupo de mujeres, hartas del mal gobierno de los hombres, urde un plan para hacerse con el poder de Atenas e instaurar el comunismo.

Mérida pone de nuevo a la mujer en el punto de mira con esta comedia que, en definitiva, propone una forma de política alternativa a la tradicional. A través del humor y la crítica, la obra pretende concienciar de que los problemas políticos actuales vienen ocurriendo a lo largo de los siglos. «¡Si fuera verdad! ¡Si las mujeres mandaran!», exclama Echanove.

Así, la obra se ha reescrito haciendo guiños a la actualidad, como el grito puesto en boca de las asambleístas atenienses «¡Que nos devuelvan las ruinas!», una incorporación al texto inspirada en una vieja reivindicación de Melina Merkoúri, la primera mujer griega en ser ministra, que reclamaba así la devolución de los mármoles del Partenón expoliados hace doscientos años por el conde de Elgin y que se encuentran desde entonces en el Museo Británico de Londres.