Para esta exposición, explica Óscar Alonso Molina, comisario, «Chema López se ha involucrado en uno de sus más complejos y densos proyectos a nivel argumental, donde el espectador deberá comparar lo que conoce y la información que maneja con fragmentos dispersos de otros relatos, en principio incompatibles entre sí, tras la esperanza de dar sentido a un recorrido hilvanado narrativamente. Se trata, pues, de encajar las piezas y que cada cual obtenga un desenlace propio».

La pieza principal, realizada ex profeso para la muestra, es un dibujo expuesto en horizontal sobre una mesa de nueve metros de longitud, ordenado a modo de galeradas y formado por doce piezas de 100 x 70 cm cada una. Un libro ficticio que da título a la exposición –La ilusión y el miedo–, en el que se mezclan fotogramas y diálogos de la película El cebo (1958), de Ladislao Vajda, con citas e ilustraciones del libro Arte e ilusión, de Ernst H. Gombrich, prestándose a una interpretación abierta. «El artista asocia imágenes pertenecientes a ambas obras con otras que, por alusión, eco o encuentro inesperado, enriquecen la lectura inicial sobre el estatus de la imagen, haciendo continuas y sutiles alusiones a la cultura y al contexto sociopolítico de nuestro país», apostilla el comisario.

El trabajo de Chema López hace referencia a la fotografía, la fotocopia o escenas cinematográficas, prestando también atención a las marcas que sufren al ser proyectadas o a través de procesos de impresión fotomecánica (negativos, positivados, impresiones, multicopiado). Esta muestra protagoniza Conexiones XIV, la nueva edición del programa puesto en marcha por Museo ABC y Fundación Banco Santander para contribuir al desarrollo y la difusión del arte contemporáneo.