Este encuentro analizará la evolución de la prensa y la fotografía de guerra desde los años 80 hasta hoy, y propondrá una reflexión conjunta sobre el papel de estos reporteros en contacto directo con el sufrimiento humano y los intereses de los bandos en conflicto.

Para Sánchez, un fotoperiodista debe ser riguroso en la manera de plantearse su trabajo. Debe documentar las tragedias que ocurren a su alrededor, buscar otras formas de mostrar la realidad. No es necesario caer en el sensacionalismo para relatar el drama humano: «Las víctimas tienen derecho a la dignidad y a nuestro respeto. Hay que mostrarlas de la manera que nos gustaría a nosotros mismos que nos mostrasen si estuviéramos en su lugar. Y si no están de acuerdo en salir en una historia hay que respetar totalmente su decisión. El periodismo, especialmente en el medio televisivo, está sometido a los vaivenes del comercio y lógicamente cada vez se aleja más de la obligación de informar. Hace 20 años una historia duraba tres minutos en la televisión y hoy apenas aparece como una cola de diez segundos».

John Berger dice en su libro Otra manera de contar que “una fotografía es un lugar de encuentro donde los intereses del fotógrafo, lo fotografiado, el espectador y los que usan la fotografía son a menudo contradictorios”. Cuando Gervasio Sánchez trabaja en contacto con el sufrimiento ajeno su objetivo es «conseguir que este encuentro deje de ser contradictorio o al menos permita alcanzar un equilibrio entre los diferentes intereses. Creo que la única manera de conseguirlo es estableciendo un acuerdo tácito con los protagonistas de mis fotografías. Hay que personalizar sus dramas, sus desconsuelos, sus esperanzas».

La dignidad es lo que importa, así se presenta este taller donde Sánchez repasará su trayectoria y obra, desde las primeras imágenes de los ochenta hasta uno de sus últimos proyectos, el duro trabajo de documentar a lo largo de seis años, con la también periodista Mónica Bernabé, el drama que sufren las mujeres afganas. Por el camino ha cubierto la mayor parte de las guerras de América Latina, Asia y África, la del Golfo y la guerra en Bosnia y los posteriores dramas de la antigua Yugoslavia.

  • La matrícula es gratuita por orden de inscripción en el correo artesplasticas@dphuesca.es

Transmitir el drama con decencia

Para el mítico fotoperiodista español, «la fotografía que retrata el drama humano, esencia de nuestro fracaso, debe evitar la esquematización, la frivolidad y el espectáculo. Vivir entre las víctimas te da otra perspectiva porque acabas conociendo sus espacios mágicos, sus secretos mejor guardados, sus sueños inconclusos. Si no sufres el dolor, el grito de las víctimas, su digno silencio, ¿cómo puedes transmitir el drama con decencia, cómo puedes intermediar entre el dolor y el olvido, el horror y la banalidad?».