La ópera se basa en dos cuentos que tradujo Ezra Pound (1885-1972), extraídos de la recopilación de relatos orientales que escribió el poeta de ascendencia española Ernest Francisco Fenollosa (1853-1908) partiendo del teatro noh japonés.

En el primer cuento, Always Strong (Siempre fuerte), un joven guerrero y virtuoso laudista, muerto heroicamente en el campo de batalla, reaparece convertido en un atormentado fantasma, incapaz de tañer su bello instrumento como otrora; en el segundo, Feather Mantle (El manto de plumas), un pescador encuentra una deslumbrante capa de plumas que solamente está dispuesto a devolver al ángel que la posee si éste le baila su danza celestial.

La riquísima paleta sonora de Sariaaho, de sorprendentes texturas tímbricas, armonías flotantes y una depurada utilización del tratamiento electrónico del sonido, concede a ambos relatos una atmósfera cósmica y misteriosa, en los que la trama, como una alegoría, se diluye en una especie de celebración metafísica.

Lo sobrenatural

Ambas historias, de temas independientes pero de simétrico andamiaje, indagan sobre nuestra relación con lo sobrenatural, con seres y universos intangibles, con un mundo espiritual cada vez más alejado de la realidad física, material y veloz que nos atrapa. En esta huida hacia delante, su director de escena, Peter Sellars, reivindica la ópera como un puente simbólico hacía ese ‘otro lado’, una travesía mágica con la participación, casi ritual, del público.

El contratenor Philippe Jaroussky, protagonista de los dos cuentos que conforman la ópera, vuelve al Teatro Real después de sus actuaciones en Celos aún del aire matan de Juan Hidalgo (2000), L’incoronazione di Poppea de Claudio Monteverdi (2010), y dos conciertos: uno dedicado a Händel ─Fuegos de artificio de un castrato (2011)─ y otro, a Vivaldi (2014).

En Only the Sound Remains su voz alcanza registros y timbres casi sobrehumanos, debido al tratamiento electroacústico concebido por Kaija Saariaho, que escribió los papeles especialmente para él. A su lado: la bailarina Nora Kimball-Mentzos, que desdobla su personaje, y el bajo-barítono Davone Tines, habitual colaborador de la compositora.

Cuartetos

Junto a ellos, el cuarteto vocal Theatre of Voices ­–Else Torp, Iris Oja, Paul Bentley-Angell y Steffen Bruun─, el cuarteto de cuerdas Meta4 Quartet ─Antti Tikkanen, Minna Pensola, Atte Kilpeläinen y Tomas Djupsjöbacka─ y tres instrumentistas finlandeses: Heikki Parviainen (percusión), Camila Hoitenga (flauta) y Eija Kankaanranta (Kantele, instrumento tradicional finlandés semejante a la cítara).

Al frente de este conjunto camerístico está Ivor Bolton, director musical del Teatro Real, que explora un nuevo registro dentro de su amplio repertorio, con la sensibilidad y musicalidad que exige la partitura.

Los murales de Julie Mehretu ­–a la que el Centro Botín ha dedicado recientemente una gran retrospectiva– cobran vida gracias a la iluminación mutante y evocadora de James F. Ingalls.

Excelente acogida

Only the Sound Remains ha sido encargada y coproducida por el Teatro Real junto con la Nationale Opera & Ballet de Ámsterdam, la Ópera Nacional Finlandesa, la Opéra national de Paris y la Canadian Opera Company.

Su estreno mundial ─con dirección de escena de Peter Sellars y protagonizada por Philippe Jaroussky, Davone Tines y la bailarina Nora Kimball-Mentzos─ tuvo lugar en Ámsterdam el 15 de marzo de 2016. Posteriormente se presentó en Helsinki (abril de 2017) y en París (enero 2018), siempre con una excelente acogida por parte del público y de la crítica.