Para Jesús Iglesias Noriega, director artístico de Les Arts, este título «es una de las grandes apuestas artísticas y técnicas de los últimos años». La Metropolitan Opera de Nueva York, la English National, la de Ámsterdam o el prestigioso Festival d’Aix-en-Provence, entre otros, han caído rendidos ante la inteligente e imaginativa puesta en escena de McBurney.

Tras su aplaudida dirección de La dama de picas, con la que inauguró el curso operístico en Valencia, James Gaffigan se reencuentra con la Orquestra de la Comunitat Valenciana y el Cor de la Generalitat para clausurar una exitosa temporada con una de las óperas más apreciadas por el público.

Reparto

Les Arts reúne en el reparto a las jóvenes estrellas del momento, con algunos de los intérpretes que han conquistado al público internacional con la impactante producción de McBurney. El tenor italiano Giovanni Sala realiza su tercera incursión en Valencia con el papel de Tamino, mientras que debutan la emergente soprano barcelonesa Serena Sáenz (Pamina), el bajo británico y favorito del Metropolitan, Matthew Rose (Sarastro), la electrizante y ascendente soprano Rainelle Krause (Reina de la Noche), el barítono húngaro-rumano y asiduo del Covent Garden, Gyula Orendt (Papageno), y el reconocido tenor estadounidense Brenton Ryan (Monostatos).

El reparto cuenta, además, con una importante presencia del Centre de Perfeccionament, con integrantes de la actual promoción: Irakli Pkhaladze (Orador), Iria Goti (Papagena), Antonella Zanetti (Primera Dama), Laura Fleur (Segunda Dama); y exalumnos: Alejandro López, Jorge Franco (Dos sacerdotes, dos caballeros). Luzia Tietze (Tercera Dama) y el Trinity Boys Choir (Tres muchachos) completan el elenco.

 

El actor, escritor y director Simon McBurney, reconocido como uno de los grandes de la escena europea, se ha rodeado de un equipo creativo de primer nivel: Michael Levine (Escenografía), Nicky Gillibrand (Vestuario), Jean Kalman (Iluminación), Finn Ross (Vídeo) y Gareth Fry (Sonido).

McBurney propone una puesta en escena sencilla pero llena de magia teatral que invita a la imaginación del espectador: el elemento principal es una plataforma suspendida y móvil y, además, confiere a la música un papel protagonista e integra a la orquesta en el espectáculo de forma que el público pueda ver a los los músicos en todo momento. Su apuesta por la tecnología no se basa tanto en la exhibición de los últimos avances, sino en un guiño al estreno de la propia ópera en Viena, en la que Schikaneder ya estaba a la vanguardia de los efectos teatrales. Gran parte de los efectos visuales y sonoros se crean a plena vista, como parte también de la magia del espectáculo.

– Les Arts ha programado un total del seis representaciones de La flauta mágica. Además de su estreno este jueves, 6 de junio, el Singspiel de Mozart se representará en la Sala Principal los días 8, 12, 14, 17 y 19 de junio.