La muestra, a cuyo acto inaugural está previsto que asista el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, recoge diferentes dibujos y poemas manuscritos realizados en el último periodo de la trayectoria de Victoriano Crémer, reconocido escritor, poeta y ensayista nacido en Burgos hace 102 años y afincado en León.

Un artista llamado Crémer

Se trata de una exposición que hace hincapié en la faceta artística del escritor a través de 23 dibujos acrílicos de 42 por 30 centímetros, más de 30 poemas manuscritos y algunos folios mecanografiados por el propio artista, alguno de ellos inédito.

Alonso Ares explicó que en los acrílicos de la exposición destacan los colores rojo, amarillo, verde, ocre y negro, que son "colores fuertes de la vida" y aseguró que esta exposición nace en Victoriano como una necesidad, como una emoción suya que acompaña a la poesía; los garabatos no son más que signos que están impregnados con color; y por eso se hacen más intensos.

Al respecto, precisó que el poeta se refirió a estos "garabatos" como espacios de su propia experiencia. En su opinión, los poemas que acompañan a los dibujos son también el trazo y la renovación de la poesía, por lo que en ambos son la voz y el pulso del poeta.

Esta muestra de Manuscritos y Garabatos de Crémer emergió desde el pulso de la vida para anotar las palabras. Son, en definitiva, una nueva versión de la poesía de Victoriano. Los garabatos y el trazo de los poemas son mundos dormidos en lo interior del hombre, en este caso del poeta que los concibe.

Por su parte, el director del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, Gonzalo Santonja, manifestó que la muestra acoge el "plano de los latidos más hondos" del autor.

Fiebre creativa

En su opinión, se trata de palabras que obedecen a la "fiebre creativa de un pulso urgente", seguro sobre el paso del tiempo y diseños que con frecuencia dibujan espacios cerrados, aunque rotos o combatidos por trazos en movimiento y ráfagas de color, rebeldías. Como si un desgarramiento cargado de violencia volcánica se resolviera contra las sombras, vibración del hombre frente a las angosturas impuestas.

Para Santonja, los versos de Crémer hablan del amor y la solidaridad, del trabajo y los agotamientos, de la soledad y el cansancio, del barro ancestral y la paja primigenia.

Finalmente, afirmó que aquellas personas que visiten la exposición podrán disfrutar de la "conocida fuerza y simbología" de los poemas de Crémer, así como contemplar al mismo tiempo aspectos desconocidos del autor como el color y la textura de sus dibujos y el trazo "ágil y contundente" de la mano de este artista centenario.