Esta exposición proporciona una visión global de la evolución del arte nacional e internacional a través de un enfoque transversal que incluye las más diversas expresiones artísticas. En este sentido reúne la obra de determinados artistas fundamentales en el desarrollo de la pintura desde el inicio de la modernidad hasta nuestros días, ofreciendo una visión panorámica de la plástica del siglo XX.

División tripartita

El punto de arranque se emplaza en las vanguardias internacionales de entreguerras, cuando, por primera vez, se puso en cuestión el modelo formalista. Otra característica de esta colección es la atención dedicada al arte español e internacional producido a partir de la década de 1950, como así se corroboró con las adquisiciones del arte informalista y abstracto-expresionista de esos años, compendiadas en las figuras decisivas al respecto de Tàpies, Chillida, Millares y Saura, pero también con las de los artistas más representativos de la siguiente década, como el Equipo Crónica y Eduardo Arroyo. La colección actual del IVAM ha conseguido desbordar estos marcos cronológicos, pasando a abarcar los últimos desarrollos de esta disciplina artística.

Para una ordenación espacial más dinámica se ha optado por una división tripartita, cada una de cuyas secciones responden al titulo de FIGURA, NORMA y ACCIÓN y que se reparten, respectivamente, en las galerías 1, 3 y 4 del museo. Lógicamente, la denominación de lo recogido en “Figura” pone el énfasis en la narratividad visual de gran parte de la pintura del siglo XX y actual. Esta, pues, pintura figurativa ha sido muy pródiga, sobre todo a partir de la época de entreguerras, marcada por el «retorno al orden» y por las urgencias, no solo políticas, de la década de 1930, pero retomada, tras la Segunda Guerra Mundial, a través básicamente del Pop Art y sus múltiples metástasis y derivados.

Más expresiva que analítica

En el apartado NORMA, que engloba la corriente pictórica no-figurativa de orientación analítica, se incluyen algunos de los ejemplos históricos de la la abstracción geométrica, que se inició aproximadamente en el segundo lustro de la segunda década del XX, aunque organizándose de forma conjunta a partir de la década de 1930, y cobrando, a su vez, un nuevo impulso tras la Segunda Guerra Mundial.

Junto al arte normativo, dentro de la abstracción, pintura no-figurativa o anaicónica, denominaciones que demuestran por sí solas la incertidumbre para clasificar, sin equivoco, estas corrientes, hubo una orientación más expresiva que analítica, que se manifestó casi desde los primeros pasos de la abstracción y que ha seguido operativa hasta la actualidad. El momento cenital de esta orientación se produjo tras la última gran guerra, con el expresionismo abstracto americano y otras versiones afines en la Europa de aquellos años, entre las que cabe destacar la del grupo COBRA o la de los pintores informalistas, entre los que algunos españoles tuvieron especial relevancia. Este bloque, que se ha denominado “Acción”, se centra en la dimensión matérica pura y el gesto pictórico en sí. Precisamente, por el natural arraigo de lo español dentro de esta corriente, la colección del IVAM ha hecho particular énfasis en esta pintura de “acción”, un término quizás más adecuado para englobar el sentido multiforme de una obra basada en el
 automatismo.

Pasado, presente y futuro

El subtítulo indicado en el enunciado de esta muestra, “Pasado. Presente y Futuro”, quiere señalar que la del IVAM no es una colección cerrada, y cuya apertura se ha tratado de vislumbrar de una forma metafórica con unas aportaciones que cumplen con la modesta función de señalar que hay un horizonte posible para una trayectoria que lleva un curso de un cuarto de siglo de historia, procurando que esta elección tuviera una concordancia con la espina dorsal de la colección.

Valencia. Obres mestres de la pintura en la Col·lecció de l’IVAM. Passat, present i futur. IVAM.

Del 18 de mayo al 28 de agosto de 2011.

Comisario: Francisco Calvo Serraller.