En febrero de 2009, el Prado recibirá en sus salas 70 obras de Francis Bacon (Dublín, 1909-Madrid, 1992), un artista atormentado que expresó todos los retorcimientos del alma humana, una mezcla de velocidad, rencor y rabia. Entre las piezas que se exhibirán destacan Crucifixión y El retrato del Papa Inocencio X, inspirada en Velázquez. El 26 de mayo llega, también al Prado, Joaquín Sorolla (Valencia, 1863-Cercedilla, 1923), una exposición antológica que contará con 94 cuadros y que será la muestra más completa que se ha organizado sobre el pintor valenciano en los últimos cuarenta años.
En cuanto al Museo Thyssen-Bornemisza, abrirá la temporada con La sombra (del 10 de febrero al 17 de mayo), un recorrido por una serie de artistas -desde el Renacimiento hasta finales del siglo XIX- que han utilizado la sombra como ingrediente esencial de sus composiciones. Unas semanas después (9 de junio) llegará la esperada exposición sobre Matisse, que refleja una de las etapas más personales -1914/1917- de este padre del expresionismo fauvista.
Julio González, renovador de la escultura del siglo XX, ocupará las salas del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía del 11 de marzo al 1 de junio. De la mano de la Tate Modern, también llegarán al "Reina" las esculturas e instalaciones de Juan Muñoz, una retrospectiva que exhibirá 60 grupos de figuras, instalaciones, dibujos en tela de gabardina, escritos y obras radiofónicas.