Con una voz nada encorsetada y que no duda, formas distendidas, apoyo a los más desfavorecidos y un claro y valiente mensaje por la defensa de los derechos humanos, el cardenal Bergoglio, elegido Papa (Francisco I) tras la quinta votación del cónclave celebrado el 13 de marzo de 2013, se ha ganado el respeto de creyentes y no creyentes.

Distancia y riesgos

Pero la poca distancia a la hora de poner en pantalla su trayectoria y su personalidad entraña riesgos notables, esos de los que la película cojea, aunque el resultado final sea digno, especialmente por la actuación, como siempre magnífica, de Darío Grandinetti.

El guión se ciñe a las memorias de la corresponsal en el Vaticano del diario La Nación, la periodista argentina Elisabetta Piqué (en la película, Silvia Abascal), publicadas bajo el título Francisco: Vida y revolución (La Esfera de los Libros), en las que recorre la vida del Padre Jorge en su permanente lucha contra la pobreza, la prostitución, la explotación laboral, la droga y la corrupción.

Asistimos a ese recorrido desde el adolescente que descubre su vocación hasta el jesuita elegido Papa. Entre frases para la historia y bondadosas escenas vamos sabiendo de un personaje en el que confirmamos la calidez, el buen humor y la sabiduría que su actitud, en la vida real, transmite.

Francisco: El Padre Jorge
Dirección y guión: Beda Docampo Feijóo
Intérpretes: Darío Grandinetti, Silvia Abascal, Carlos Hipólito, Emilio Gutiérrez Caba, Blanca Jara, Marta Belaustegui, Emilio Gavira, Naia Guz, Leticia Brédice
Fotografía: Kiko de la Rica
Música: Federico Jusid
Argentina-España / 2015 / 95 minutos