Diciembre de 2012. Al cabo de cuatro meses de cautiverio en Siria, dos corresponsales de guerra franceses son liberados y recibidos como héroes en París. Gabriel, el más joven, tiene poco más de 30 años y parece el más afectado. Después de pasar chequeos médicos y contestar a muchas preguntas, vuelve a estar con su familia y su novia.

Tras unas semanas de ajetreo e incapaz de encontrar rumbo y sosiego, decide viajar a Goa, en India, donde había transcurrido una parte importante de su infancia y juventud. Gabriel, interpretado por Roman Kolinka en su tercer trabajo con la cineasta, viaja a India con la esperanza de restablecer el contacto con algo profundo que lleva dentro. Pero en vez de su madre, se cruza con una joven del lugar, Maya, primer trabajo de interpretación para Aarshi Banerjee, que logrará removerle perspectivas y establecer los cimientos necesarios para olvidar y superar lo vivido. De su mano experimentará una cierta resurrección.

«En aquel 2012 –comenta la directora– recuerdo haber visto en televisión a cuatro corresponsales de guerra descender de un avión tras pasar diez meses secuestrados en Siria. El más joven de todos parecía muy tocado, estaba como ausente. Aquella visión me hizo pensar mucho y es la que me inspiró a la hora de plantearme Maya«.

Intimista y conmovedora

Hansen-Love firma una película intimista y conmovedora, más sensual que sus anteriores trabajos pero con similar habilidad para captar la realidad y la poesía de la vida, en este caso de la India y, especialmente, de la ciudad de Goa, donde el pasado y el presente, el catolicismo y el hinduismo conviven diariamente.

La banda sonora cobra carta de protagonismo en la película a través de la mezcla de temas indios, música clásica y pop anglosajón, destacando algunos temas como el Lied de Schubert, Distant Sky de Nick Cave o Come Closer de Bappi Lahiri.

«En todas mis películas se produce un imprevisto colapso. Un hecho que obliga a los personajes a reconstruirse, a buscar y encontrar una nueva forma de vivir. Esa realidad tiene que ver con mi propia existencia y, al tiempo, me ayuda a entender mejor que es eso que llamamos vida», explica la cineasta.

Mia Hansen-Love nació en París en 1981. Empezó trabajando como actriz en Les destinées sentimentales y Finales de agosto, principios de septiembre, ambas dirigidas por Olivier Assayas. Ingresó en el Conservatorio de Arte Dramático de París en 2001, pero lo dejó dos años después para incorporarse a la revista Cahiers du Cinéma, donde estuvo hasta 2005, compaginando en ese tiempo la crítica cinematográfica con la dirección de varios cortos.

Sus largometrajes han sido seleccionados en festivales como Cannes, Locarno, Toronto y Berlín, donde han logrado reconocimientos como el Premio Louis Delluc a la Mejor Película por Todo está perdonado, en 2007; Premio Especial del Jurado de la sección Una Cierta Mirada de Cannes, por El padre de mis hijos, en 2010; Mención Especial del Jurado en 2011 en Locarno por Un amor de juventud y el Oso de Plata en Berlín por El porvenir, en 2016.


Maya

Dirección y guion: Mia Hansen-Love
Intérpretes: Roman Kolinka, Aarshi Banerjee, Suzan Anbeh, Judith Chemla, Alex Descas, Pathy Aiyar, Pascal Hintablian
Fotografía: Hélène Louvart
Francia, Alemania / 2018 / 107 minutos
Golem Distribución