Se trata de la primera vez en la dilatada carrera de Zubin Mehta que dirige piezas del género lírico español, entre las que se encuentran los preludios de La revoltosa y El tambor de Granaderos, de Ruperto Chapí, los intermedios de Goyescas, de Enrique Granados, y La boda de Luis Alonso, de Gerónimo Giménez. Esta primera parte del concierto también incluye Danza número 1, de La vida breve, de Manuel de Falla.

Tras la pausa, Zubin Mehta rememora su experiencia en el Wiener Musikverein de la capital austríaca al frente de la Filarmónica de Viena, formación a la que ha dirigido en cuatro ocasiones (1990, 1995, 1998 y 2007) en el célebre concierto de Año Nuevo. Un privilegio reservado a las batutas de mayor prestigio del mundo, entre las que se encuentran Lorin Maazel y Georges Prêtre, que también han dirigido a la formación titular del Palau de les Arts.

En el atril, figuran las obras de Johann Strauss: obertura de Die Fledermaus (El murciélago), Annen Polka, Wiener Blut, Tritsch-Tratsch-Polka y An der schönen blauen Donau (El Danubio azul).