La muestra repasa la trayectoria creativa del director neoyorquino desde sus años de aprendizaje como fotógrafo en la revista Look, deteniéndose en sus 12 largometrajes, hasta sus proyectos nonatos o encargados a la responsabilidad de otros cineastas.

Para profundizar en la obra completa de Kubrick se presentan más de seiscientos ítems entre imágenes en movimiento (unos cuarenta audiovisuales); objetos y material procedentes de los archivos personales del director (documentos de investigación y producción, guiones, fotos fijas, utillaje, vestuario, maquetas, cámaras y objetivos…), y la correspondencia con el talento que lo rodeó.

Toda la carrera del director está documentada y representada, desde sus inicios con los cortodocumentales hasta su última película, Eyes Wide Shut (1999) u obras maestras como 2001: Una odisea del espacio (1968), La naranja mecánica (1971), Barry Lyndon (1975) y El resplandor (1980).

Comisariada por Hans-Peter Reichmann y Tim Heptner, del Deutsches Filmmuseum de Frankfurt, la muestra ya se ha podido ver en diferentes ciudades como Ciudad de México, Los Ángeles, Seúl o París. El crítico de cine y escritor Jordi Costa es el responsable de su adaptación en el CCCB, que incorpora contenidos inéditos.

Los visitantes encontrarán piezas icónicas, utilería y vestuario original como el Niño de las Estrellas y el disfraz de hombre mono, de 2001: Una odisea del espacio; los vestidos de las hermanas gemelas y el hacha de Jack Torrance de El resplandor; el casco con el lema «Born to kill», de La chaqueta metálica (1986), o las máscaras de Eyes Wide Shut.

Las películas de Kubrick son famosas por sus efectos especiales y la innovadora composición pictórica. En la exposición se pueden observar varias piezas del equipo de grabación con el que trabajaba: cámaras de mano, cámaras de estudio, una mesa de montaje Moviola y una selección de objetivos de cámara, incluido el objetivo Zeiss de alta velocidad con el que se grabaron las escenas de Barry Lyndon a la luz de las velas.

Los proyectos inacabados, Napoleón y Los papeles arios, también se presentan en detalle. El material recogido propiedad del director documenta hasta qué punto había avanzado el trabajo de investigación y preproducción en la película sobre el emperador francés y en la adaptación cinematográfica de la novela de Louis Begley Wartime Lies.

Asimismo, y no con menos profundidad, la exposición también se adentra en la carrera de juventud de Kubrick como fotógrafo. En aquella época, trabajó para Look, a la que contribuyó con miles de fotografías.

Artesano, panóptico, inédito

La exposición del CCCB se organiza en tres apartados:

1. Artesano Kubrick. Una instalación audiovisual de Manuel Huerga da la bienvenida al visitante y lo introduce en la vida y la obra del cineasta, un profesional obsesivo, meticuloso, exigente y perfeccionista movido por una irrefrenable y contagiosa pasión creadora.

2. Panóptico Kubrick. Constituye el bloque central y más extenso de la muestra, donde se repasa su filmografía, película por película, con la proyección de algunas escenas destacadas de cada una de ellas y la exhibición de un exhaustivo material relacionado.

3. Kubrick inédito. Este apartado que cierra la muestra está dedicado a algunas de sus películas no realizadas.