El Museo Nacional del Juego, situado en Rochester, Nueva York, ha adquirido uno de los objetos más raros y buscados en la historia del juguete: la versión más antigua conocida de un juego Monopoly, hecho a mano por Charles Darrow en 1933, proveniente de la colección de juguetes Forbes y vendido por 146.500 dólares en Sotheby's Nueva York el pasado 17 de diciembre. La reciente adquisición es aún más antigua que otra versión del juego que ya figuraba en la colección privada del museo, la llamada “Tie-Box Monopoly”, fechada también en 1933.
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Realizado a pluma con tinta y pinturas al gouache sobre una pieza circular de hule, este primer juego fue hecho a mano por Darrow, supuestamente con el tamaño y la forma de su propia mesa del comedor de su vivienda en Filadelfia. El conjunto contiene más de 200 piezas, incluyendo una hoja de normas, las cartas y las conocidas piezas del juego, el extractor de tarjetas, hoteles, casas, billetes y fichas.
La idea original
Aunque la idea original se debe a Elizabeth Magie, que en 1904 creó un juego llamado “The Landlord’s Game”, con el que trataba de señalar los peligros sociales de la desigualdad de la riqueza entre las personas, los jugadores descubrieron rápidamente que con algunos cambios el juego se hacía mucho más divertido, precisamente por todo lo contrario a la idea original, al lograr acumular grandes sumas de dinero a base de regocijarse con los problemas financieros del contrario.
El juego fue pasando de boca en boca, construyendo cada jugador su propio tablero y piezas e informalmente se le empezó a llamar “Monopoly” (Monopolio). Fue entonces cuando un ingeniero desempleado, llamado Charles Darrow, comenzó a producir una serie de conjuntos hechos totalmente a mano, dibujando y coloreando la superficie del juego sobre un hule, al principio únicamente para su familia o amigos y poco después para su venta al público.
Animado por el entusiasmo con el que la gente recibió su versión del juego, Darrow produjo por sus propios medios 5.000 ejemplares que vendió a través de unos grandes almacenes de Filadelfia. A la vista del éxito, la compañía Parker Brothers compró los derechos en 1935 y a partir de ahí las ventas del juego se dispararon en todo el mundo.
Expansión mundial
Efectivamente, durante el período de la Gran Depresión, el Monopoly fue sin duda el juego más vendido en Estados Unidos. Pero, desde entonces, se ha comercializado en 111 países y en 43 idiomas. El juego original utilizaba los nombres de propiedades inmobiliarias que resultaran familiares a los residentes en Atlantic City, Nueva Jersey, pero a partir de 1994, Parker Brothers comenzó a producir versiones locales en las que se representan las calles y edificios de las principales ciudades de diferentes países.
El National Museum of Play en Rochester es el mayor museo del mundo dedicado al estudio del juego y cuenta con la colección más completa de objetos relacionados con este campo, incluidos juguetes, juegos, muñecos y todo tipo de juegos electrónicos.
