«Sin duda estamos en presencia de un descubrimiento de primer orden, porque no se conocen demasiados ejemplos de sarcófagos intactos hallados ‘in situ’, en el mismo lugar donde fueron depositados», destaca el director del proyecto, Dr. Francisco Martín-Valentín.

Los estudios previos del sarcófago, realizados por Martín-Valentín y por Teresa Bedman, directores de la misión arqueológica del IEAE en Asasif, han determinado que la ‘Cantora de Amón’ debió vivir en Tebas hacia el año 1000 a. C. y que su ‘estatus social’ debió ser alto, a la vista de la finura extrema del sarcófago, sus inscripciones y el rostro de la mujer cuyo cuerpo momificado fue depositado en su interior hace más de tres mil años.

Buen ejemplo

“El sarcófago hallado recuerda vivamente a los mejores ejemplos artísticos de los altos personajes de la ciudad obrera de Deir El Medina, tales como el del sarcófago interior de Isis, la esposa del jefe de los obreros encargados de construir la tumba del faraón Sen-Nedyem”, asegura la egiptóloga Teresa Bedman. “Aunque, sin embargo, es claro que estamos en presencia de una pieza que es más de cien años posterior a las de la Tumba de Sen-Nedyem”.

Ahora se procederá a la restauración y consolidación del objeto descubierto y de su momia, para que ambos puedan estar debidamente protegidos y salvaguardados para la ciencia.

Para Martín-Valentín, la «ciencia española está de enhorabuena gracias a este evento, acaecido en Luxor en estos días, lo que ha sido posible gracias al soporte económico que garantiza que estos trabajos puedan tener continuidad, apoyo proporcionado en este caso por la Fundación Gaselec de Melilla».