Al parecer los atracadores irrumpieron a plena luz del día en el museo, cuando aún había unos veinte visitantes en su interior, y tras amenazar a un recepcionista y a un guardia de seguridad descolgaron las dos pinturas y escaparon en un coche.

¿Robo por contrato?

Los ladrones parecían conocer bien el lugar, puesto que se dirigieron sin dudarlo hacia las dos obras y las descolgaron de la pared con rapidez. “Sabían lo que buscaban, sin duda. Queda por averiguar si se trata de un robo por contrato. Porque esta gente no suele quedarse el botín. En todo caso lo venden”, dijo Klaas Wilting, portavoz del dueño del museo, el banquero holandés Dirk Scheringa .

El Museo Scheringa alberga la colección de Dirk y Baukje Scheringa, más de quinientas obras centradas en el realismo mágico y que iniciaron movidos por su pasión por el trabajo del holandés Carel Willink. Según la página web del museo, que cuenta con obras de René Magritte, Giorgio de Chirico, Paul Delvaux, Lucian Freud o Fernando Botero, entre muchos otros artistas, las dos pinturas robadas son las únicas obras de la colección de Dalí y De Lempicka.