en la galería de arte para sustraer esta litografía valorada en dos millones de coronas, unos 240.000 euros. Las autoridades policiales barajan la posibilidad de que el robo se llevara a cabo por encargo.

Otra versión de El Grito (Munch pintó varias) fue robada de la Galería Nacional de Noruega en 1994 por dos ladrones que dejaron una tarjeta postal que decía: "Gracias por la poca seguridad». Uno de los ladrones, Paal Enger, ya había cumplido una pena de cuatro años por el robo de El Vampiro de Munch en 1988. Otra versión de esta obra fue robada junto con Madonna en agosto de 2004 del Museo de Munch. Las obras aparecieron dos años después considerablemente dañadas.