La feria, que se convertirá en la segunda más grande de Europa, después de la de Milán, tiene una superficie total de 240.000 metros cuadrados y estará conectada con el aeropuerto y el centro de la ciudad por metro. Las obras concluirán a finales de este año, cuando queden finalizadas las dos torres situadas en uno de sus tres accesos, la Gran Vía.

El proyecto de ampliación, a cargo de Toyo Ito y su socio español B-720 Arquitectos, resultó ganador en un concurso internacional en el que tuvo que competir con estudios de la talla de Ábalos y Herreros, Norman Foster, Clorindo Testa o Wiel Arets. En él se plantea una arquitectura dinámica y ágil que tiene en cuenta los masivos desplazamientos que se producen en las ferias y las necesidades del público.

El propio Ito ha afirmado que "la arquitectura debe expresar visualmente el movimiento de los objetos, la gente, la información y la naturaleza misma". Por eso, las formas orgánicas y el uso de la energía natural son elementos distintivos del diseño del arquitecto japonés, que ha realizado un proyecto que trata de alejarse por completo de los clásicos recintos feriales planos y que da respuesta a su entorno, con un gran respeto por el medio ambiente, además de aprovechar con gran diligencia los pabellones existentes.

Cinco zonas diferenciadas

Finalmente, la feria quedará dividida en cinco zonas, identificadas con distintos equipamientos: Puerta de la Gran Vía, compuesta por dos torres gemelas que darán la bienvenida a los visitantes; Puerta de la Zona Franca, que corresponde al vestíbulo de entrada que incluye la oficina de la Fira de Barcelona y un auditorio con salas de conferencias y espacio para los expositores; Puerta de Amadeu Torner, un vestíbulo de entrada para exposiciones presidido por una cúpula; Eje central, un espacio que permite un acceso dinámico y fluido con una longitud de un kilómetro, y Fachada de la calle Ciències y de la calle Foc, paisajismo y fachada que incluyen elementos naturales como agua y árboles.

Las torres de Ito se convertirán en los edificios más altos de Hospitalet y el hotel será el segundo más alto del área metropolitana de Barcelona.

 

Toyo Ito nació en Seúl (Corea) en 1941 y se graduó de la Universidad Nacional de Tokio (Japón) en 1965. Trabajó durante cuatro años en la oficia de Kiyonori Kikutake Arquitectos y Asociados para abrir más tarde su propia oficina, Urbot (Urban Robot), en 1971 en Tokio. En 1979, el estudio cambia su nombre al de Toyo Ito & Associates Architects. Con el cambio inicia un período de expansión y difusión internacional, que aparte de todo tipo de galardones y premios, le ha llevado a realizar proyectos en todo el mundo.

Ito es conocido por las concepciones extremadamente creativas que aplica a sus edificios, en los que busca fundir los mundos físico y virtual. Entre otros premios ha recibido el del Instituto de Arquitectura de Japón por Silver Hut, el Mainich por el Museo Municipal de Yatsushiro, el de la Academia de Arte de Japón y el Mundial de Arquitectura 2002 por la Mediateca de Sendai.

Entre sus realizaciones en Japón, destacan la casa Aluminum de Kanagawa (1971); la casa White U en Nakano, Tokio (1976); el Museo Municipal de Shimosuwa, en Nagano (1993); el Auditorio de Nagaoka, en Niigata (1996); el Ayuntamiento de Notsuharu, Oita (1998); el T Hall, en Taisha, Shimane (1999); el Parque Agrícola de Oita (2000),  la Mediateca de Sendai, en Miyagi (2002); el pabellón para la Expo 2000, en Hannover; el pabellón Brugge 2002, Brujas, y el pabellón Serpentine Gallery, Londres (2002).