Hans Haacke. Del 14 febrero al 23 de julio de 2012

Hans Haacke (Colonia, 1936) está considerado pionero y uno de los principales representantes de la llamada crítica institucional surgida a finales de los años sesenta. Su trabajo explora los mecanismos de construcción y transmisión del poder a través de la institución como estructura reguladora de todas las dinámicas económicas, artísticas, políticas y sociales.

A lo largo de 2011, Haacke ha estado trabajando en un nuevo proyecto que verá la luz en esta exposición acompañado por una amplia selección de obras que abordan las principales preocupaciones que jalonan su trayectoria, desde el mercado y los efectos de la globalización (The Invisible Hand of the Market, 2009), hasta las relaciones entre arte y poder (Thank you Payne Weber, 1979; Global Marketing, 1986-2011 y Helmsboro Country, 1990) o Der Pralinen Meister, 1981, su famosa serie sobre el creador del Museum Ludwig de Colonia.

Otros trabajos a destacar de la muestra son aquellos que hacen referencia a los mecanismos de representación, para los que el artista se sirve de los gráficos que usa la sociología o el urbanismo. Estas piezas de investigación, resueltas con simplicidad minimalista y gran eficacia visual, estudian la relación entre perfiles demográficos e ideológicos/económicos: Gallery Goers’ Residence Profile, 1970; Sol Goldman & Alex Dilorenzo, Manhattan Real State Holdings, 1971. La muestra también reconstruirá la obra News (1969-70), procesando para el visitante noticias sobre los temas de la exposición en tiempo real materializadas a través de una impresora.

La exposición se cerrará con una serie de obras que aluden a la crisis actual (Nothing to declare, 1992; Waiting for the End of History, 1992, y Trickle Up 1992), presentando asimismo una obra a la que Haacke ha recurrido en numerosas ocasiones a lo largo de su carrera: Grass Grows (1969-2011), un cúmulo de tierra donde crece la hierba que funciona como contrapunto orgánico a los flujos económicos, sociales y políticos en los que se centra su obra.

James Coleman. Del 24 de abril al 27 de agosto de 2012

Esta exposición será la primera gran retrospectiva que se realice de la obra de James Coleman (Ballaghaderreen, Irlanda, 1941). Conformada por unas 15 obras, la muestra incluye desde sus piezas iniciales realizadas en Milán en los años setenta hasta su trilogía de los años noventa, formada por Background, Lapsus Exposure e INITIALS, así como otras piezas cruciales como Fly, Box, Untitled: Philippe VACHER y la obra Retake with Evidence presentada en la Documenta 12, que explora, a través del la imagen audiovisual procedente de diversos soportes, las relaciones temporales entre imagen y sujeto.

Coleman se formó en Dublín y trabajó en Londres y en París antes de trasladarse a Milán, donde desarrolló su carrera artística durante veinte años antes de regresar a la capital irlandesa. Su obra se encuentra en colecciones tales como el Irish Museum of Modern Art de Dublín, el Museum Ludwig de Colonia, el Stedelijk Museum voor Actuele Kunst de Gante y el MACBA de Barcelona. Recientemente tres de sus trabajos se han incorporado en la colección del Reina Sofía.

Nacho Criado. Del 8 de mayo al 1 de octubre de 2012

Una nutrida selección de piezas propondrá un acercamiento a las constantes y preocupaciones de la práctica artística de Nacho Criado (Mengibar 1943 – Madrid 2010). Incluirá desde sus piezas iniciales en madera hasta sus monumentales y características esculturas de hierro y cristal, así como otras obras en fotografía, maquetas, dibujos y vídeos.

Criado realizó estudios de arquitectura y sociología en Madrid y Barcelona, respectivamente. En 1969 se instaló en Madrid, donde residió hasta su muerte. Considerado uno de los principales artistas españoles de los últimos años, y apreciado sobre todo por sus aportaciones como pionero del arte conceptual y de la escultura experimental, expuso en los principales museos españoles.

Rosemarie Trockel: Un cosmos. Del 22 de mayo al 24 de septiembre de 2012

La muestra Un Cosmos reunirá una serie de piezas que darán cuenta del ideario y afinidades estéticas de Rosemarie Trockel, en diálogo con una selección de su propia obra realizada en diversos momentos. Esta particular asociación de piezas se compondrá de trabajos que desde una perspectiva más convencional pertenecen al ámbito de la ciencia, pero que por su sofisticación y refinamiento se adentran en el campo del arte, como las delicadas reproducciones en vidrio de criaturas marinas y flores creadas en el siglo XIX por los Blaschkas para el estudio de los naturalistas académicos o las acuarelas de la artista del siglo XVII Maria Sybilla Merian, cuyas representaciones de la flora y la fauna, tan bellas como impecablemente precisas, resultaron tener un valor incalculable para el estudio científico, que se mostrarán junto con un ensamblaje de los años sesenta del siglo XX de la feminista radical Ruth Francken, compartiendo espacio con esculturas de lana de Judith Scott, artista marginal afectada por síndrome de Down.

En la exposición se podrán ver, además, piezas de cerámica creadas por la propia Trockel y obras de reciente producción realizadas en cristal. Este excepcional conjunto sentará las bases para investigar desde una perspectiva novedosa la práctica singular e influyente desarrollada por Trockel a lo largo de casi tres décadas.

Espectros de Antonin Artaud. Lenguaje y Arte en los años cincuenta. Del 18 de septiembre al 17 de diciembre de 2012

La muestra abordará la influencia del poeta, dramaturgo y actor francés Antonin Artaud (Marsella, 1896-París, 1948) en las artes plásticas, centrándose en su legado crucial para entender las neovanguardias de la posguerra en Estados Unidos, Francia y Brasil.

A través de diversos medios (pintura, música, cine y poesía), la exposición mostrará cómo el deseo de Artaud de trascender los confines del lenguaje, tanto hablado como escrito, sobrevivió en el trabajo de una serie de artistas preocupados por algunas de las cuestiones artísticas más relevantes de mediados del siglo XX, como son el cuerpo y la participación del espectador, incluyendo obras de Gil Wolman, François Dufrêne, Isidore Isou, Guy Debord, Wolman, Dufrêne, Maurice Lemaître, Robert Rauschenberg, John Cage, Öyvind Fahlström, Ferreira Gullar, Lygia Clark y Hélio Oiticica, entre otros.

Encuentros con los años treinta. Del 2 de octubre de 2012 al 7 de enero de 2013

La década de los treinta fue un momento turbulento con el ascenso de los gobiernos totalitarios y la constante migración de artistas como parte del entorno social, económico y político que estuvo marcado por los sueños utópicos y la agitación del momento. Esta exposición presentará la década basándose no sólo en las narrativas propagandísticas (a pesar de que es una característica esencial de los treinta), sino en el hecho de cómo los artistas tuvieron que trazar su propio camino en un ambiente de creciente violencia. El tema central de la exposición analizará los caminos que trazaron los artistas en las relaciones interpersonales e internacionales como motor de producción artística.

La muestra se estructurará en los siguientes bloques temáticos: Fotografía y Publicidad, Exposiciones Nacionales e Internacionales, Abstracción, Surrealismo, Guerra Civil y Realismo; y presentará al público los más importantes movimientos, ideas y artistas de la década a través de más de 400 obras de artistas como Picasso, Miró, Tanguy, Rodchenko, Man Ray, Delaunay, Masson, Mondrian, Sironi, Torres-García, Calder, Moore o Kandinsky. Como complemento a la exposición, el Museo programará un ciclo de cine en el que se profundizará sobre todas las cuestiones expuestas y sobre la importancia de este medio como difusor de las ideas e imágenes de la década.

María Blanchard. Del 16 de octubre de 2012 al 25 de febrero de 2013

La exposición dedicada a María Blanchard (Santander, 1881-París, 1932) quiere reivindicar a esta artista española que vivió la pintura con todas sus incertidumbres y convicciones y que llegaría a ser una de las grandes figuras de la vanguardia. Nacida el mismo año que Picasso, Gargallo o Vázquez Díaz, Blanchard perteneció a una generación de artistas cuyo reconocimiento nunca fue parejo con el suyo. Su desarrollo artístico fue tardío, no alcanzando la madurez creativa hasta bien entrada la treintena, tras instalarse en París. Hasta los años setenta, con la monografía de Rodríguez Alcalde, fue objeto de una visión sesgada que redujo el estudio de su obra pictórica a unos pocos tópicos y se centró en buscar una justificación biográfica a su estilo.

La exposición recorrerá las tres etapas vitales en que podemos dividir su creación: una primera ‘Etapa de Formación (1908-1913)’, que incluye su obra más temprana, caracterizada por la permeabilidad a las influencias de sus maestros. Un segundo período, ‘Etapa de Consolidación (1913-1919)’, a partir del momento en que Blanchard se inserta con naturalidad y pasión en el movimiento cubista, al que aportará plasticidad y sentimiento, y por último, la que podríamos llamar ‘Etapa de Retorno al Orden (1919-1932)’, tras su decisión de alejarse del cubismo y volver a la figuración, en la que crea abundantes e importantes pinturas que poseen un acento inconfundible y son lo más conocido de su producción.