Con René Daniëls. Una exposición es siempre parte de un todo mayor, centrada en la obra de uno de los más exquisitos pintores que Europa produjo en los ochenta, el Reina Sofía quiere examinar cómo pintura y texto, color y estructura, no sólo no son incompatibles, sino que se relacionan mutuamente.

El análisis y estudio del arte español ocupa un lugar preferente dentro de la programación del Museo. Las muestras dedicadas a Soledad Sevilla y a Muntadas son buena prueba de ello.

Una línea de fuerza que se mantiene es la atención al arte joven y la producción de obra nueva, uno de los ejes del programa Fisuras, dentro del cual se presentará el último proyecto realizado por el artista vienés Andreas Fogarasi, uno de los artistas austriacos con mayor proyección.

Exposición estrella

La programación de 2011 incluye dos exposiciones de tesis: Una luz dura, sin compasión. Movimiento de la Fotografía Obrera 1921-1939, que se clausura el próximo 22 de agosto, y Locus Solus. Impresiones de Raymond Roussel, que se centrará en la figura de este poeta, novelista y dramaturgo francés y su influencia en el arte.

Finalmente, la que podríamos denominar la próxima “exposición estrella” es la retrospectiva dedicada a Alighiero e Boetti, uno de los artistas más importante vinculados al arte povera. A diferencia de otros personajes de su talla, a Boetti nunca se le ha dedicado una gran exposición que haga justicia a su obra. Esta será la primera ocasión para ver su trayectoria artística de un modo muy completo y en toda su complejidad.

La colección, años 60 y 80

Conforme a lo previsto, en torno al mes de noviembre se presentará el tercer tramo de la colección permanente, que cubrirá los años sesenta y ochenta: el período de la transición democrática y los primeros gobiernos socialistas en nuestro país; y del neoliberalismo y la primera globalización a nivel internacional.

Si el inicio se sitúa en el período que antecede a Mayo del 68, el final vendría determinado por la caída del Muro de Berlín en 1989. Este es un periodo esencial para entender el mundo en el que vivimos. Gran parte de las transformaciones de la sociedad actual tienen sus orígenes en esta época. El minimalismo, el arte conceptual, las prácticas de campo expandido (la escultura que se abre al paisaje, el cine que se expone en los museos, etc.) son características de esos años. Asimismo, el arte latinoamericano va a tener una relevancia especial en esta presentación. Las salas dedicadas a este período acogerán obras de figuras como Bruce Nauman, Nancy Spero, Muntadas, Gordillo o Lygia Clark.

Con unos 2.200 metros cuadrados de extensión, este tramo de la colección ocupará los dos espacios del edificio de Nouvel, que están siendo acondicionados para ello. Una parte muy sustancial de las obras es novedosa ya que se incluirán un número importante de recientes adquisiciones, donaciones y depósitos.

Fogarasi.
Del 14 de septiembre de 2011 al 9 de enero de 2012.

El MNCARS producirá, dentro de su programa Fisuras, el último proyecto del artista vienés Andreas Fogarasi (1977), actualmente en desarrollo. Galardonado con el León de Oro por su instalación en el Pabellón de Hungría de la pasada Bienal de Venecia, Fogarasi, formado en la Escuela de Arquitectura y Bellas Artes de Viena, reflexiona en su trabajo sobre cómo las ciudades contemporáneas pueden convertirse en una imagen, en una marca. A través del análisis de las intervenciones en el espacio, la arquitectura y la tipografía explora el desarrollo de la comunicación visual como un elemento clave en las estrategias especulativas de los poderes políticos y económicos y los modelos de representación actuales.

El proyecto que está realizando para el Museo Reina Sofía analizará la instrumentalización del arte abstracto como elemento de modernidad durante la Guerra Fría, a través de una instalación de vídeo y de una serie de fotografías y logotipos dispuestos sobre estructuras de mármol que se exhibirán en diferentes espacios del Museo.

Alighiero e Boetti. Estrategia de juego.
Del 4 de octubre de 2011 al 12 de febrero de 2012.

Se trata de la mayor retrospectiva que sobre Alighiero e Boetti (Turín, 1940-Roma, 1994) se ha organizado hasta el momento y la primera que se realiza en España. Alrededor de cien obras componen la muestra, que abarcará toda su trayectoria artística, desde 1966 hasta su temprana muerte acaecida en 1994.

Tras un largo periodo de estudio y documentación, los comisarios, con el apoyo del Archivio y la Fondazione Alighiero e Boetti, han realizado una cuidada selección, prestando especial atención a mostrar al artista como una de las figuras más fascinantes e influyentes de la segunda mitad del siglo XX.

La exposición reunirá obras fundamentales de su carrera profesional provenientes de numerosas colecciones internacionales, algunas de las cuales será la primera vez que se muestren al público. Destaca una selección de su serie Mappa (1971-1994), la más popular entre las realizadas por el autor. Se trata de un conjunto de mapas mundi de gran formato, bordados a modo de tapices y realizados en colaboración con artesanos de Afganistán y Pakistán.

Además, se podrá ver su Lampada Annuale (1966), una bombilla colocada en una caja de madera que se enciende al azar únicamente durante 11 segundos cada año, y que es una de las obras más representativas de su producción povera. Otras de las creaciones presentes en la muestra son: Ordine e Disordine (1973), una serie de tapices de letras de colores que el artista entregaba a bordadoras afganas y pakistaníes para que eligieran su composición final; o sus lavori biro, obras realizadas a bolígrafo con amigos y conocidos.

Con la muestra se va a intentar destacar la capacidad de Alighiero e Boetti de transformar cualquier materia prima en una obra de arte y la complejidad conceptual, visual y estética, presentes siempre en el trabajo de este artista. También se pondrá de manifiesto su interés por destacar el trabajo colectivo frente a lo protagónico.

Se suele etiquetar a Alighiero e Boetti como artista conceptual miembro del movimiento povera. Sin embargo, se desvinculó de este último en la década de los setenta; incluso él mismo era reacio a ser clasificado, aunque se convirtió en un referente original para toda la generación de artistas italianos e internacionales contemporáneos. Trabajó con una amplia gama de herramientas, técnicas y materiales: papel, plexiglás, yeso, aglomerado… Para él no constituían sólo un medio sino un fin en sí mismos, explotando y valorando las características intrínsecas a los mismos. La obra de este artista ha estado influenciada por sus profundos intereses teóricos (filosofía, alquimia, esoterismo), así como por sus viajes.

La muestra se completará con la producción de un catálogo en inglés y en castellano, publicado por las tres instituciones implicadas en este proyecto. En él, se incluirán más de 140 imágenes y contará con ensayos de los comisarios -Lynne Cooke, Mark Godfrey y Christian Rattemeyer-, además de textos de otros autores como Claire Gilman o Jason Smith.

René Daniëls. Una exposición es siempre parte de un todo mayor.
Del 20 de octubre de 2011 al 26 de marzo de 2012.

El Reina Sofía presentará en el Palacio de Velázquez del Parque del Retiro una retrospectiva de René Daniëls (Eindhoven, Países Bajos, 1950). René Daniëls. Una exposición es siempre parte de un todo mayor mostrará la complejidad de la obra de este artista, a la vez que intentará contextualizar los años ochenta de una manera distinta a como se ha hecho hasta ahora. Para ello se reunirá una vasta selección de sus pinturas, dibujos al gouache y obra gráfica, junto a una amplia selección de bocetos, cuadernos y documentos de los archivos del artista, que abarcan desde mediados de los años setenta hasta 1987.

Además, se exhibirán algunas grabaciones en Super 8 filmadas por Däniels, a fin de ofrecer una visión sobre la contracultura del punk y sus derivados, imperante en la época y que alimentó la obra del artista.

René Daniëls se graduó en arte en 1976 y once años más tarde sufrió una hemorragia cerebral que puso fin a su actividad pictórica. Durante este breve período realizó una singular y fascinante obra que sigue en auge hoy día, influyendo en jóvenes generaciones de artistas. Desde sus comienzos exploró las posibilidades del medio pictórico con un estilo muy personal: conectando la historia del arte con la vida cotidiana y la cultura popular, y dando, a la vez, un papel importante a la ambigüedad y los dobles sentidos.

Si bien en sus primeras obras el artista recurría a las pinceladas expresionistas, a partir de principios de la década de los ochenta se caracterizan por presentar capas transparentes de pintura finamente aplicadas, a menudo con fragmentos de lienzo sin manchar. Estos trabajos parecen estar inacabados, invitando al espectador a “concluirlos” y a descubrir, una y otra vez, nuevos significados en los mismos. Desde entonces, los tres elementos que Daniëls considera relevantes para su arte –literatura, arte visual y vida cotidiana– adquieren un papel principal.

En las obras que creó entre 1984 y 1986 aparecen muros abstractos que recrean supuestos espacios expositivos y que adoptan la forma de pajaritas. A menudo contrastan con cuadros de color, como si fueran pinturas que cuelgan de los muros de la supuesta galería. Dichos diagramas espaciales podrían igualmente verse como escenarios en los que tienen lugar representaciones o actos, y que están en su mayoría caracterizados por la falta de acción.

Su última serie, creada antes de sufrir un derrame cerebral en diciembre de 1987, se denomina Lentebloesem (Florecer de primavera) y lleva aún más lejos la idea del espacio abstracto como motivo. En estas pinturas el fondo monocromático contrasta con elementos lineales flanqueados por frases y palabras. Parecen planos de planta o mapas y las palabras pintadas junto a las líneas remiten a lugares, tiempos y objetos.

Lentebloesem es la apoteosis de una obra que ha perseguido criticar la visión unilateral de los historiadores del arte quienes, a menudo, aíslan la obra de la sociedad, ubicándola únicamente dentro de la tradición y de la propia historia. La obra de Daniëls adopta así una posición singular dentro de las artes visuales de finales de las décadas de los setenta y ochenta.

El catálogo que se editará con ocasión de la muestra, incluirá ensayos de Pam Emmerik, Ronald Groenenboom, Paul Sztulman y Dominic van den Boogerd, así como entrevistas a cargo de Jan Van Adrichem y Martijn Van Nieuwenhuyzen, Anna Tilroe y Dirk van Weelden.

Locus Solus. Impresiones de Raymond Roussel.
Del 25 de octubre de 2011 al 27 de febrero de 2012.

Esta es la primera gran exposición que se realiza sobre la figura del poeta, novelista y dramaturgo Raymond Roussel (París, 1877-Palermo, 1933) y su influencia artística y literaria en el arte contemporáneo. El título de la muestra hace referencia a la que quizás son sus dos novelas más conocidas: Locus solus e Impresiones de África.

Calificado de “autor difícil” por Robert de Montesquiou, poeta francés vinculado al movimiento del simbolismo, Roussel dejó una obra poética, novelística y teatral sin precedentes en la historia de la literatura, tanto por sus universos donde abundan espectáculos, máscaras y fantasmagorías, como por su escritura clara y descriptiva.

Perteneció a la alta burguesía nostálgica de las grandezas del pasado y a lo largo de su vida se mantuvo a distancia de las vanguardias “como hombre plenamente decidido a no seguir otra inclinación que la de su espíritu”, según lo definía André Breton. Sin embargo, acabó dirigiéndose a ese grupo de admiradores para poner en circulación su obra.

El procedimiento de Roussel a la hora de escribir, basado en la homofonía y en el doble sentido de las palabras, conformó un imaginario que caló hondo en los artistas más importantes de la época, como Marcel Duchamp o André Breton. Para el primero, Roussel fue “aquél que indica el camino”, hasta el punto de utilizarlo como “catalizador” en su ciclo La Mariée (“la novia”). Por su parte, Breton, líder del movimiento surrealista, se refería al escritor como “el mayor magnetizador de todos los tiempos”. La influencia de Roussel sobre la modernidad artística se convirtió en un mito y no ha dejado de extenderse.

En esta muestra y a través de unas trescientas piezas –pinturas, fotografías, esculturas, ready mades, instalaciones y vídeos, además de numerosa documentación (libros, revistas, manuscritos)– correspondientes a unos treinta artistas, se revelará el fuerte peso que ejerció Roussel sobre algunos movimientos de vanguardia, como los surrealistas.

Podrán verse obras de Francis Picabia, Max Ernst, Man Ray, Salvador Dalí, Joseph Cornell,Guy de Cointet, Rodney Graham, Allen Ruppersberg, Ree Morton, Terry Fox, René Daniëls, Cristina Iglesias o Francisco Tropa, entre otros. La obra de Roussel está presente en la paranoia-crítica de Salvador Dalí, con quien incluso mantuvo correspondencia, y ello queda reflejado en la muestra no sólo a través de sus pinturas, sino también mediante la película Impressions de la Haute Mongolie, Hommage à Raymond Roussel (1974-75), que realizó con José Montes Baquer, y la escultura Lilith y la doble Victoria de Samotracia (1966).

A través de documentos, también se mostrará en la exposición el influjo no menos relevante de Roussel en otros ámbitos no visuales; es el caso del escritor y etnógrafo francés Michel Leiris, primer testigo y transmisor de Roussel, y cuya obra antropológica fue en muchos aspectos precursora de la descolonización, o el del poeta John Ashbery, representante de la escuela de Nueva York.

Se editará un catálogo con textos de Patrick Besnier y Annie Le Brun, contextualizando la inspiración y los escritos de Raymond Roussel en el ambiente cultural de su época. Asimismo, se incluirán escritos de los comisarios de la exposición, Manuel Borja-Villel, João Fernandes y François Piron, y una entrevista de éste último a John Ashbery acerca de la recepción de Roussel en Francia y Estados Unidos y su influencia sobre una generación de artistas y escritores de los años setenta.

La publicación abordará también la presencia de la obra de Roussel en Dalí y Duchamp mediante distintos ensayos, y se completará con una antología de textos de artistas –André Breton, Robert Desnos, Dalí, Michel Leiris, John Ashbery, Guy de Coinet, Allen Ruppersberg, Vito Acconci, Rodney Graham, Morgan Fischer o Mike Kellev– sobre la influencia del autor francés en su trabajo.

Soledad Sevilla. Escrito en los cuerpos celestes.
Del 10 de noviembre al 29 de abril de 2012.

La artista Soledad Sevilla (Valencia, 1944) presentará en el Palacio de Cristal del Parque del Retiro la instalación Escrito en los cuerpos celestes, creada ex profeso para dicho espacio. Se trata de una estructura de aluminio y policarbonato impreso que reproduce la bóveda del propio Palacio y recrea la imagen del cielo nocturno.

Será la instalación de mayor tamaño que la artista ha realizado en su última etapa, iniciada a principios de los años noventa y en la que explora las relaciones entre la luz, la materia y el espacio. Con este objetivo, Sevilla crea sutiles elementos que conviven con los ya existentes y los activan potenciando sus aspectos variables, especialmente la luz. A través de estructuras abstractas, la artista muestra en estas obras su interés por los valores atmosféricos y espaciales, presentes ya en su anterior creación bidimensional. “Mi objetivo es añadir al mundo físico de la creación algo intangible. Aportar un presentimiento a unos acontecimientos presentes pero no visibles, que oímos pero no vemos”, explica ella misma.

Soledad Sevilla se dio a conocer al formar parte del Seminario del Centro de Cálculo de Madrid (1969-71), en el que un grupo de artistas experimentaron con la generación automática de formas plásticas. En sus inicios realizó una pintura geométrica y seriada en la que se puede reconocer el germen de las estructuras geométricas con las que trabaja en la actualidad y que cuentan con formas más libres, pero basadas en un riguroso análisis técnico. En estas obras, se aprecian también ciertos aspectos ambientales muy destacados en su etapa pictórica de los años ochenta: pinturas de alta densidad cromática en las que consigue una difícil combinación entre la reducción formal y la riqueza sensorial.

A partir de ambas experiencias, la geométrica y la óptica, la artista ha evolucionado hacia una obra más compleja y radical que se sitúa en la frontera entre la escultura, el paisajismo y la arquitectura.

La artista realizó estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Jorge (Barcelona) y en la Universidad de Harvard (Estados Unidos). Durante su carrera ha recibido diversos galardones, como el Premio Nacional de Artes Plásticas (1993) y la Medalla al Mérito de las Bellas Artes (2007). Su obra está presente en los principales museos y colecciones españolas y recientemente el Reina Sofía ha adquirido un importante corpus de obras de su primera época geométrica.

El Parque del Retiro no es ajeno a su trabajo. En 1994, el Centro Nacional de Exposiciones presentó, en el Palacio de Velázquez, una retrospectiva que incluía las instalaciones La habitación de la lluvia; La que recita la poesía es ella. Humo; La que recita la poesía es ella. Fuego y Que su cante me lastima.

Muntadas. Entre/Between.
Del 22 de noviembre 2011 al 26 de marzo de 2012.

El Museo ha organizado una gran exposición en torno a la obra de Antoni Muntadas (Barcelona, 1942), artista internacionalmente reconocido y uno de los pioneros del arte conceptual y de medios. La muestra recorrerá su dilatada carrera, desde los años setenta hasta la actualidad.

A lo largo de estas cuatro décadas, Muntadas ha utilizado la performance, el vídeo, la fotografía, las instalaciones multimedia, publicaciones, Internet y el arte público para tratar asuntos clave de nuestro tiempo, tanto políticos como sociales.

Su comprometido trabajo incluye una investigación profunda e incisiva de situaciones políticas y aspectos culturales: ha indagado en ideas tales como la relación entre lo público y lo privado, los flujos de información entre los medios, y las dinámicas de la arquitectura oficial.

La muestra recoge trabajos destacados de toda su trayectoria: proyectos tempranos de los años setenta, en los que utilizaba los “subsenses” (sub-sentidos); la intervención de 1981 Media Eyes, con la que incitaba al público a reflexionar sobre la pregunta “¿qué estamos mirando?”; o la serie On Translation –todavía en fase de realización–, que versa sobre los sistemas de poder, visibles e invisibles, de una sociedad dominada por los espectáculos de los medios de masas, el hiperconsumo y los constantes avances tecnológicos.

Entre/Between se estructura en nueve secciones que abordan los temas sobre los que Muntadas ha investigado y experimentado a lo largo de su carrera. Comienza con Personal Space / Micro Espacios, donde se podrán ver trabajos de juventud que exploran el cuerpo y el entorno físico, vídeoinstalaciones y obras raramente expuestas con anterioridad que revelerán información autobiográfica sobre el artista; Mediascapes / Espacios de los Media ofrecerá instalaciones y proyecciones de vídeo que aluden a los recursos de los medios de comunicación de masas, sus mensajes y el flujo de la información; y la sección Spheres of Power / Esferas de Poder mostrará obras que ahondan en el análisis de los medios y el control que ejercen en la política, la economía y la religión, incluyendo The Board Room (Sala de Dirección, 1987) y Portraits (Retratos, 1995).

En cuanto a Domain of Fear / Construcción del Miedo, dos vídeos de larga duración mostrarán cómo las diferencias políticas y culturales pueden llevar a la manipulación y la dominación. La arquitectura y la naturaleza de los espacios públicos en las ciudades serán los temas principales de la sección Urban Territories / Terrenos Urbanos, donde se diseccionará cómo se construye la memoria pública y se negocia el uso de lo público y lo privado, mientras que en Places of Spectacle / Espacios de Espectáculo se analizarán ideas alrededor de una arquitectura de contención en torno a los estadios.

Por otro lado, los trabajos en Field of Translation / Campo de Traducción tratarán sobre la interpretación de palabras, conceptos e historias. En la sección The Archive / El Archivo se podrá ver un trabajo clave en la trayectoria de Muntadas: The File Room (La Sala de Archivo, 1994), archivo online que recoge actos de censura que han tenido lugar en el campo de las artes y que sigue funcionando como portal Web que el público internauta puede consultar y completar con nuevos casos. La sección final, Systems of Art / Sistemas del Arte, incluirá instalaciones y obras conceptuales que critican las jerarquías del mundo del arte y reflexionan sobre su institucionalización, sus políticas y sus negocios.

Muntadas estudió ingeniería industrial en Barcelona y se inició en el mundo del arte a través de la pintura. Sin embargo, a principios de los setenta se interesó por el arte multimedia y se mudó a Nueva York, donde reside y trabaja en la actualidad. Además de mantener, a día de hoy, una intensa actividad docente, su obra se encuentra representada en algunas de las colecciones más importantes del mundo. Ha participado en algunos de los festivales internacionales de arte más destacados: la Documenta VI y X, la Bienal de Venecia (1976) o la Bienal de São Paulo (1981), entre otras. En 2009 fue galardonado con el Premio Velázquez de las Artes Plásticas.

Con motivo de esta exposición, el Museo Reina Sofía editará una publicación que incluirá textos de críticos e historiadores del arte como Jo-Anne Birnie Danzker, Ina Blom, Gerald Raunig, Judith Revel, Simon Marchan Fiz, Paolo Fabbri, Valentín Roma y la comisaria de la exposición, Daina Augaitis.