En 1999, cuando tenía 24 años, conoció en una discoteca de Nueva York a su doppelganger, Ben Brock, y a partir de ese momento comienzan una colaboración que dura hasta el día de hoy. En vídeos y fotografías, Brock ha encarnado a Bradley encarnando a distintas figuras trágicas del imaginario adolescente: Kurt Cobain, Ian Curtis o Michael Jackson que, junto a referencias a la saga de La guerra de las galaxias o personajes como Holden Caulfield, conforman el imaginario a través del cual Bradley exorciza su propia biografía a la vez que refleja a toda una generación.

El juego de espejos que se establece entre el artista Bradley, el doble Brock y los ídolos de la cultura juvenil retratados examina, según sus palabras, «los efectos psicológicos de la idolatría, el mimetismo y el inconsciente colectivo en la formación de la identidad adolescente de una generación específica: mi generación». 

Realidad y ficción

La obra que presenta en esta ocasión, Shadow, se basa en el ultimo rodaje del actor River Phoenix, Dark Blood, que moriría durante el mismo, dejándolo inacabado. Para ello, Bradley colabora con el cineasta Ed Lachman, director de fotografía de aquella película, cuya memoria personal es, además, crucial para el proyecto. Ambos viajaron hasta la localización original en el desierto de Utah para rodar este falso prólogo del filme original.

En la narración se mezclan elementos del guión original junto con otros imaginados por Bradley, además de hallazgos o referencias al propio proceso creativo establecido entre ambos. Por ejemplo, cuando al visitar el bar que frecuentaba Phoenix durante el rodaje encuentran por casualidad fotos del actor en compañía de Lachman y que pasan a convertirse en un elemento capital de Shadow. La obra se convierte en un juego a tres bandas Bradley-Lachman-Phoenix que reflexiona sobre el presente, el pasado y el futuro, la realidad y la ficción, la creación y la memoria.

Dos grandes artistas

Ed Lachman (Nueva Jersey, 1946), cineasta y director de fotografía con una carrera única, tanto en Hollywood, incluyendo nominación a los Oscar, como en el cine independiente americano. Ha trabajado para Jean-Luc Godard, Wim Wenders, Bernard Bertolucci, Werner Herzog, Sofia Coppola, Steven Soderbergh o Todd Haynes.

Por su parte, Slater Bradley (San Francisco, 1975) ha cultivado tanto la pintura como la fotografía aunque la parte fundamental de su obra son vídeos. Ha participado en la Bienal del Whitney y en exposiciones colectivas en el PS1, el CGAC, el Museo Guggenheim Bilbao o en el Museum of Contemporary Art de Chicago.