Durante el acto, que tuvo lugar en la sede de la Academia del Cine, Antonio Resines, su director, se congratuló, «pese a la dificultad de los tiempos que corren», de la buena tendencia de nuestro cine, «lo que es un claro exponente de que el público quiere ver cine español».

125 millones recaudados

Dividido en nueve capítulos que exponen y evalúan el panorama del cine que se realizó en nuestro país a lo largo del pasado año, el Anuario arroja cifras contundentes que se concretan en los más de 125 millones de euros recaudados por las películas españolas a lo largo del curso.

Al explicar las razones de estos resultados se apuntó que el éxito no responde a una sola razón, aunque en buena medida está relacionado con el taquillazo de la película de Emilio Martínez Lázaro Ocho apellidos vascos, que con 55,10 millones de euros recaudados a lo largo del año se ha convertido en la cinta con mejor resultado en taquilla de la historia.

Pero el éxito de Ocho apellidos vascos no solo radica en su gran volumen de facturación, comentó la directora del ICAA, sino que también tiene el valor de haber «roto tabúes y haberse convertido en un factor dinamizador de la sociedad».

Abundó en este sentido Arturo Guillén, representante de Rentrak, una de las tres empresas responsables del Anuario, con Barlovento Comunicación y Media Research & Consultancy, al comentar que hace solo 10 años era impensable que una producción nacional recaudase más dinero que Harry Potter o Star Wars, «algo que ahora es posible, como ha podido comprobarse en 2014».

Contra la piratería

Tras señalar que «parece que hemos dejado atrás la racha negativa», el presidente de la Academia afirmó que las previsiones para el año en curso son optimistas, «2015 comenzó muy bien con películas como Perdiendo el norte o Ahora o nunca, que todavía siguen en taquilla. Todo indica que seguiremos bien, porque faltan por estrenarse pesos pesados como la de Julio Medem, Ocho apellidos catalanes, Atrapa la bandera o lo nuevo de Fernando León de Aranoa.

Pero a pesar de que «todos los indicadores son favorables», apostilló Resines, «todavía hay que luchar más eficazmente contra la piratería, pues son muchos los que siguen lucrándose al margen de la legalidad». Las estimaciones señalan que las descargas ilegales causaron el año pasado un lucro cesante a la industria cinematografica de 571 millones de euros.