Temple triunfó como estrella infantil del cine durante la Gran Depresión y cuando dejó el mundo del espectáculo, en los años 50, se reinventó y centró su carrera en la política.

En un comunicado, su familia ha querido reivindicar su figura como actriz, diplomática y, sobre todo, como madre, abuela y bisabuela.

La actriz nació en 1928 en Santa Mónica y comenzó su carrera en 1932, cuando todavía no había cumplido los cuatro años. Bright eyes, en el año 1934, fue la primera película que protagonizó. Fue embajadora de Estados Unidos en Checoslovaquia entre los años 1989 y 1992.