Mount Kimbie – “Made To Stray” (2013)
779
post-template-default,single,single-post,postid-779,single-format-standard,bridge-core-3.1.0,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,qode-content-sidebar-responsive,qode-child-theme-ver-1.0.0,qode-theme-ver-19.1,qode-theme-bridge,disabled_footer_bottom,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-7.6,vc_responsive

Mount Kimbie – “Made To Stray” (2013)

Después del dubstep, a finales de los 2000s la música club se quedó sin aparente descendencia. Mientras la EDM tomaba el mainstream en USA, en UK, la cuna del rave, los clubbers más inquietos no tenía rumbo fijo ni movimiento al que adherirse. Sin embargo, las mutaciones seguían surgiendo y se decidió establecer un cajón de sastre en el que cupiera cualquier avance electrónico mínimamente relacionado con el baile; lo llamaron post-dubstep.

 

Dominic Maker y Kai Campos formaron Mount Kimbie en la universidad. Al dúo londinense se les asocia con el origen del término post-dubstep precisamente por esta macedonia de influencias y estilos. UK Garage, Bass Music, Ambient, R&B… Con sus primeros trabajos llamaron la atención del esencial sello Warp, con el que ya sacaron su segundo álbum «Cold Spring Fault Less Youth» (2013) en el que se encontraba este «Made to Stray». En la pieza se desata una tormenta de ritmos marciales crudos entre un brumoso ambiente disonante; poco a poco el sol empieza a salir con un acorde de piano y más tarde la voz nos trae la calma definitiva.

 

Define la década porque Mount Kimbie han sido uno de los dúos que más y mejor han exprimido las posibilidades de la electrónica, cambiando de perspectiva en cada álbum, en cada tema. Si bien es cierto que «Love What Survives» (2017) fue su acercamiento sibilino al universo pop que les procuró mayor repercusión y proyección, «Made to Stray» es su petardazo rompe pistas. Un tema que comienza áspero pero que fluye hasta la suavidad del pop británico, un cordero con la piel de un lobo.

No Comments

Post A Comment