Sus lujosas salas albergan colecciones tan diversas como las provenientes del Egipto de los faraones, el mundo de Grecia y Roma, las culturas siberianas, el arte renacentista, la escultura neoclásica o la pintura contemporánea, con obras de, entre otros muchos artistas, Matisse y Picasso. Obras que conforman un abanico que va del siglo V antes de Cristo hasta la vanguardia del siglo XX.

¿Qué supone el convenio que permite la realización de las exposiciones del Prado y el Hermitage?

Con la firma de estos convenios y protocolos de intenciones vivimos un día histórico que, personalmente, me hace sentirme enormemente feliz. Comenzamos un apasionante proyecto que va a significar mucho para las dos instituciones. Este intercambio de exposiciones constituye un hecho histórico para dos museos que pese a la lejanía de las ciudades que los albergan están muy próximos. Son muy cercanos por su tipología y estilismo.

Ha hablado usted de diálogo entre culturas…

En efecto. He dicho que las exposiciones no se intercambian sino que son complementarias. Como señala el director del Museo del Prado, Miguel Zugaza, vamos a tener la oportunidad de disfrutar de un museo dentro de otro museo: el Prado dentro del Hermitage y el Hermitage dentro del Prado. Nuestros museos nos unen y acercan nuestras culturas. Permiten que los rusos sepan más de lo español y los españoles de los rusos. Se establece así un auténtico diálogo entre culturas. Creo que este hecho tiene en sí mismo una gran importancia.

¿En su país se conoce el arte español?

Evidentemente se conoce menos de lo que sería deseable pero se conoce bastante de lo que en España ha surgido. Para los rusos la palabra Prado sintetiza en buena medida el amor por el arte español y no es un tópico aquello que habla de la sensibilidad y el alma rusa para todo lo que está relacionado con la cultura. Como ha señalado el embajador de Rusia en España, la cultura ha marcado desde hace muchos años la relación entre los dos países.

Tendrá, pues, una buena acogida esta exposición en la sede del Hermitage…

Por supuesto. Como he señalado en el acto de firma del convenio estamos esperando impacientes las obras provenientes del Museo del Prado para dialogar con ellas y estoy seguro que ese diálogo va a resultar extraordinariamente enriquecedor.