Durante el recorrido de la exposición se puede observar la evolución técnica y temática de Herrero, cuyos procedimientos compositivos transmiten la impronta de cada momento. Buena parte de su genialidad reside en mostrar en un solo instante la esencia de los sentimientos y de las emociones, de lo que está ocurriendo en el interior de los personajes. «Yo busco el esqueleto de las cosas. Me gusta llegar adentro. Penetrar en las mismas fibras. Algo así como la radiografía del ser», afirmaba Herrero en una entrevista.