La muestra se compone de obras en las que se pueden ver a las características figuras femeninas que forman parte del universo artístico de Miss Van, en el que mantiene la ambigüedad en sus personajes, sensuales y sofisticados, a la vez que salvajes e inocentes. «Me inspira todo lo que me rodea y la vida en general: lo que veo en internet, en libros u otros documentos; las imágenes que me gustan las imprimo y las repaso una y otra vez, aunque luego no me apoye en ellas para que todo sea más original», explica sobre el proceso de trabajo que lleva a cabo en el estudio.

En palabras del comisario de la muestra, Fernando Francés, la artista “concibe a la mujer enérgicamente sensual y femenina, con una docilidad aparente, pero con mirada desafiante y fiera. Repleta de ambigüedades y confusiones, sus personajes pertenecen al mundo real y a la fantasía. Su trabajo artístico se basa en la emoción, en el sentimiento». La artista francesa afincada en Barcelon entiende que su personalidad es lo único que puede aportar a su trabajo, mientras que «la técnica, es algo que se aprende o se puede copiar», asegura.

En ese sentido, sus iconografías representan seres mitad mujer mitad animal. Gatas que evidencian un deseo innato próximo al inconsciente. Sensualidad y erotismo a un mismo tiempo. «La gata como animal simbólico representa también el lado misterioso de la mujer, su maldad, su independencia, su lado felino. Elegir un animal con uñas, que araña, no es un asunto baladí, no es por casualidad. Hay un deseo de representar aspectos tópicos y reales del rol femenino. Pero al tiempo la gata es un animal que, aunque doméstico, tiene su propia libertad e independencia, es autónomo y nunca se llega a domesticar del todo. La gata representa al animal doméstico indomable”, concluye Francés.

Mundo onírico

Las representaciones de sus mujeres han evolucionado con el paso del tiempo, ocultando más partes de su cara y fisionomía. Los ojos almendrados, largas pestañas, miradas felinas y bocas diminutas son sus señas de identidad. Algunas de sus figuras tienen un aire sensual, al cubrir el rostro con las mascaras, pero al mostrar de forma sugerente el resto del cuerpo, como I Feel Safer Here, 2016; otras, sin embargo, están cubiertas por una serie de elementos ornamentales, desde el rostro hasta el torso, como Sepia, 2015, en el que se potencia el lado misterioso.

Las plumas, sombreros, máscaras o lentejuelas forman parte del ideario femenino para resaltar precisamente los principales atributos de la mujer. Miss Van recoge estos elementos y los reinterpreta con una estética cercana a la belleza clásica de principios del siglo pasado, cuando la mujer cambió su indumentaria como símbolo de libertad y empezó a mostrar más partes del cuerpo.

La artista expresa en sus trabajos un mundo cercano al de los sueños y los deseos. La gama de colores pasteles que utiliza representa una atmósfera cercana al mundo onírico, como en Mujeres Pájaros, 2016.  En sus personajes busca potenciar el lado más sofisticado, pero también el más salvaje, proponiendo un doble juego al espectador. Miss Van potencia las características femeninas, y como mujer, siente que tiene que mantener intacto el lado más emotivo y auténtico, aunque también le gusta enseñar varias caras de las mismas figuras, conformando en cada una de ellas una estética diferente. “Intento sorprenderme en cada uno de mis trabajos y empezar algo sin saber cómo va a acabar”, aclara.

Muro y lienzo

Vanessa Alice Bensimon es conocida mundialmente como Miss Van. Reside y trabaja actualmente en Barcelona, aunque sus intervenciones artísticas la han llevado por ciudades de todo el mundo. La artista ha simultaneado su trabajo sobre muro con obras realizadas en el estudio en lienzo. Pero sus pinturas mantienen siempre un estilo muy característico: muestran mujeres con el rostro cubierto por una máscara con representaciones diferentes, como pueden ser animales salvajes. Sus personajes posan con actitudes en algunos casos sugerentes, sensuales, y en otras ocasiones con gestos contrarios, incluso infantiles.